YouTube se abre al documentalismo amateur sobre urbanismo e ingenería social

Cuando el usuario medio piensa en YouTube probablemente lo haga en los youtubers de moda, aquellos populares entre jóvenes. Sin embargo, en esta plataforma también se puede encontrar otro tipo de contenido, existiendo canales dedicados a la divulgación científica, filosófica y política.

Entre estos canales, cabe destacar el trabajo del mexicano César Hernández, conocido en YouTube bajo el sobrenombre de Esquizofrenia Natural, un canal dedicado a la divulgación de contenido relacionado con la filosofía, la sociología y la psicología. Entre sus muchos trabajos cabe destacar un documental de una hora de duración sobre un tema desconocido para muchos, la ingeniería social. La obra cuenta con una excelente realización y montaje, más teniendo en cuenta que ha sido realizado con un bajo presupuesto.

Gran parte del documental gira alrededor del urbanismo y la forma en la que influye en los habitantes de la ciudad. El mejor ejemplo probablemente sean los inmensos bloques de apartamentos construidos a mediados del siglo XX en distintos lugares del mundo. Desde Rusia y los países del Bloque Oriental hasta Latinoamérica y Asia. Estas edificaciones fueron construidas en bastantes ocasiones para dar alojamiento a los emigrantes que llegaban desde el campo hasta las urbes. Pese a ser planeadas como una forma de crear ciudades perfectamente organizadas, los bloques de apartamentos no tardaron en presentar problemas.

El más famoso ejemplo fue el inmenso complejo de Pruitt-Igoe, construido en la ciudad estadounidense de San Luis en 1954. Este gigantesco proyecto fue dirigido por el arquitecto estadounidense de origen japonés Minoru Yamasaki, famoso por ser el arquitecto del World Trade Center y que constituye uno de los más importantes representantes junto a Le Corbusier de este tipo de urbanismo, tan de moda a mediados del siglo XX.

Pruitt-Igoe pasaría a la historia por ser un grandísimo fracaso. Los vecinos que lograban prosperar económicamente se mudaban a mejores vecindarios. Como resultado, muchos de los apartamentos quedaron abandonados, siendo posteriormente ocupados de forma ilegal. La situación fue tal que en 1972 el complejo tuvo que ser demolido. El paisajista e historiador de la arquitectura Charles Jencks dijo que cuando Pruitt-Igoe fue finalmente destruida la arquitectura moderna murió.

También, el autor hace hincapié en las ciudades creadas desde cero durante el siglo XX, siendo Brasilia el caso más evidente. La ciudad más moderna del mundo en su momento, que no ha soportado tan bien como sus creadores deseaban el paso de los años. Hernández argumenta que Brasilia, al igual que muchos otros barrios de América Latina de la época, fueron planificados desde los gobiernos, ya fuesen locales o estatales, y no desde el punto de vista del habitante. Como consecuencia, los residentes de estas ciudades normalmente no se sienten ciudadanos de las mismas.

Los abundantes y altos bloques de apartamentos, tan frecuentes en ciudades como Nápoles, Hong Kong o el sector comunista de Berlín en la Guerra Fría, son un claro ejemplo de deshumanización del ciudadano, más cuando estos edificios son construidos por los gobiernos, siendo los países del este de Europa el caso más notable, con el objetivo de agrupar una gran cantidad de personas en un espacio pequeño. El autor explica que este tipo de edificaciones se centran únicamente en la funcionalidad ya que son planeados desde el punto de vista práctico. Si bien esto suena como una buena idea, al no tomarse en cuenta una perspectiva desde el punto de vista del ciudadano, muchas de estas construcciones terminan, al igual que Pruitt-Igoe, en un rotundo fracaso.

Pero en el documental también se abordan otros temas relacionados con la organización de las ciudades. Un ejemplo, muy frecuente en España, es el de los bancos que al tener barandilla en el interior, pareciendo más una serie de sillas unidas que un banco, no permiten tumbarse en los mismos. Esto, al igual que otros bancos de extraña forma que si bien permiten sentarse hacen que tumbarse en ellos sea extremadamente incómodo, es un claro ejemplo de como las ciudades pretenden, por todos los medios, negar a los sintecho un lugar donde descansar. El ejemplo más extremo de esto se encuentra en la entrada de algunos edificios donde se han colocado pequeñas pirámides en el suelo para evitar que los mendigos pasen la noche allí.

En definitiva, este documental sobre ingeniería social (que adjuntamos al finalizar este texto) trata este tema y otros igual de interesantes. El autor también tiene otras obras audiovisuales similares, que recomiendo visualizar si se está interesado en este materia.