Ical Villafranca celebrará este jueves una nueva edición de su tradicional fiesta de los ‘maios’, que parte de un ritual ancestral de culto a la naturaleza. Una celebración que está relacionada con las celebraciones de ‘maios’ de origen gallego y la única de carácter humano en Castilla y León, que cuenta con la declaración de interés turístico provincial.
La tradición consiste en vestir a un niño de vegetales, para lo que se utiliza la ‘cañaveira’ o ‘mazandón’ -también llamada planta de ‘maio’ por este uso- de manera que no se le reconozca y parezca la humanización de un arbusto. Así, se trata de representar eñ resurgir de la naturaleza después del crudo invierno, en el ciclo anual.
A este ‘maio Humano’ se le pasea por las diferentes calles del pueblo mientras sus acompañantes van cantando una canción que tiene una parte de presentación de ese ‘maio’ a los vecinos y otra parte de coplas petitorias, para que el vecindario aporte una propina a esa naturaleza que es generosa año tras año y que se pide- y aún mucha gente la da- en forma de castañas secas, que son un fruto simbólico e imprescindible del entorno berciano.
Los grupos de ‘maios’, que habrán salido de diferentes barrios y después de recorrer el pueblo, se reunirán en la plaza Mayor para, a continuación, ir a comer todos juntos y a cuenta de las propinas recibidas en el Jardín de la Alameda. En la sobremesa habrá diversas actividades lúdico-relajantes, canto, baile y por supuesto entretenimiento para los más pequeños, según informaron fuentes municipales.