La alcaldesa de Ponferrada, Gloria Fernández Merayo, entregaba este viernes el premio Ciudad de Ponferrada Gil y Carrasco de las Letras 2016 al historiador y profesor jubilado Vicente Fernández Vázquez, Tito, un cacabelense asentado en la capital del Bierzo que ha dedicado su vida a la investigación y a la docencia. La entrega del galardón tuvo lugar en el Teatro Bergidum, en una acto de gala al que asistieron otras autoridades como el presidente del Consejo Comarcal, Gerardo Álvarez Courel, y el vicepresidente de la Diputación para el Bierzo, Ángel Calvo, además de la corporación local y alcaldes de otros municipios bercianos. La Banda Ciudad de Ponferrada fue la encargada de poner música al evento.
El galardonado hizo un repaso a su carrera, y tuvo unas palabras para los familiares que le introdujeron en el mundo del saber y que ayer le arroparon con su presencia. También recordó los tiempos en los que comenzó la docencia, en el País Vasco. De vuelta en Ponferrada fue cuando se dedicó a investigar en profundidad para conocer más de la cultura y el patrimonio berciano pero siempre con el objetivo de compartir el conocimiento, de divulgar.
Porque el galardón reconoce al historiador pero también al docente, tal y como se pudo comprobar en los vídeos que se proyectaron recordando su trayectoria y tal como quiso destacar el ganador del premio, una escultura de Rogelio Pacios y Gerardo Queipo y 3.000 euros. “La docencia es una vertiente que aún me emociona”, señaló el profesor jubilado.
Su candidatura fue elegida por unanimidad por un jurado formado por la concejala de Cultural, María Antonia Gancedo, y por José Luis Suárez Roca, Elena Fernández, Javier García Bueso y Manuel Alejandre Prada.
Tito también tuvo palabras a la hora de dedicar el premio: familia, amigos, alumnos y editores, además de Antolín de Cela, quien le precedió en el galardón -que se recupera después de seis años- y con el que viene trabajando en las últimas décadas en varias publicaciones.