Los vecinos de San Pedro de Trones han continuado evacuados “por precaución” una noche más

Los vecinos evacuados el pasado lunes de sus domicilios en la localidad berciana de San Pedro de Trones pasaron la noche de ayer, la tercera consecutiva, lejos de sus casas “por precaución”, informaron fuentes de la Junta tras la reunión del Centro de Coordinación Operativa Integrado (Cecopi) que lucha contra el incendio forestal procedente de Galicia que afecta al municipio de Puente de Domingo Flórez. Según las mismas fuentes, las fuertes rachas de viento y las altas temperaturas no ofrecían garantías de seguridad para el regreso de los habitantes a la población.

Sobre el terreno, el fuego se encontraba ayer por la noche “relativamente bajo control” en la zona berciana pero no así en la parte gallega. A lo largo de la tarde han surgido varios conatos debido a las pavesas del otro lado del río Sil que han pasado a la zona entre Puente y Salas de la Ribera. Los medios permanecen en esta zona para sofocar los rescoldos y evitar reactivaciones y continúan trabajando en los alrededores de San Pedro de Trones. Por su parte, la delegada territorial de la Junta en León, Ester Muñoz, se desplazó de nuevo a este municipio para seguir de primera mano las labores de extinción.

En la mañana de ayer quedó restablecida en la zona la circulación por la carretera N-536, que ayer tuvo que cerrarse al tráfico en el punto kilométrico 34 por el riesgo de caída de material del incendio. En la tarde de ayer, también se cortó el tráfico ferroviario en la línea que une Ponferrada con la localidad gallega de Monforte de Lemos, según informaron fuentes del Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif).

Respecto al otro incendio forestal con nivel de peligrosidad 2 activo en el territorio de la comarca, en las inmediaciones de Montes de Valdueza, su evolución es favorable y los medios trabajan para cerrar el perímetro del fuego tras una tarde complicada por el viento en la zona sur, en el sector que avanza hacia Peñalba de Santiago.

Los medios aéreos concentran sus esfuerzos en las dos vertientes que rodean la población, por las que las llamas avanzan muy lentamente y sin entrañar riesgo para las personas ni para las viviendas. El amplio dispositivo desplegado en la zona trabaja también para evitar que el fuego se reproduzca a lo largo del perímetro del incendio, que abarca unos 30 kilómetros de perímetro.