UPL detecta “inconcreciones y contradicciones” en el proyecto para la distribución de gas liquado

La Unión del Pueblo Leonés (UPL) de Torre del Bierzo ha detectado “inconcreciones y contradicciones”  en el proyecto de la planta de distribución de gas liquado, tras revisar su expediente en el Servicio Territorial de Industria. Es por ello que reclama que los servicios jurídicos y técnicos del ayuntamiento de la localidad, que preside el bercianista (CB) Gabriel Folgado, realicen cuanto antes los perceptivos informes sobre la solicitud de autorización administrativa para poder presentar alegaciones al proyecto.

Una de las contradicciones más destacadas del proyecto, según UPL, es que su publicación en el Boletín Oficial de Castilla y León (Bocyl) hace referencia, como “área solicitada”, a todo el término municipal, pero el plano presentado solo afecta a la localidad de Torre del Bierzo. “En la leyenda del plano número cinco de las canalizaciones de la red apuntan a un total de 2.230 metros (2,23 kilómetros). La canalización de toda el área solicitada, (tal y como figura en el anuncio), es decir todas las localidades del término municipal, superaría, a nuestro entender, alrededor de 40 kilómetros”, explican.

Los concejales de UPL en Torre, Verónica del Río y Melchor Moreno, consideran además que la ubicación de la planta distribuidora es “poco afortunada” al tratarse de suelo rústico y zona de policía de la Confederación Hidrográfica Miño-Sil (CHMS), a escasos metros del casco urbano. Ante esto, piden al “la suspensión inmediata del periodo de información pública” de dicha solicitud y que se remita al Ayuntamiento  copia de los expedientes para facilitar su examen a los interesados.

Una “broma de muy mal gusto”

Los ediles entienden asimismo que es una “broma de muy mal gusto” que se haya elegido el 4 de diciembre, día de Santa Bárbara, para sacar a información pública un proyecto de este tipo en un municipio minero. “Una planta para distribuir gas natural licuado al pie de un emblemático pozo de carbón, el Pozo Viloria, cerrado y abandonado, como otros tantos de la comarca y de la provincia, por la inoperancia de la Junta y la arrogancia del ministro de Industria, José Manuel Soria”, indican.

Además, señalan que “es un insulto el que se argumente para el cierre de las minas de carbón su naturaleza de combustible fósil emisor de contaminantes  a la atmósfera, y  se proyecte la instalación de una planta para distribuir  gas natural licuado, combustible fósil también, y por tanto emisor contaminantes a la atmósfera,  a escasos metros  de un emblemático pozo de carbón”.

Los leonesistas se suman así a la denuncia de ese “sin sentido” que ya manifestó recientemente su procurador, Luis Mariano Santos, en las Cortes, “que supone el que en las calderas de las calefacciones de los pueblos mineros se esté quemando carbón extranjero, que emite más contaminantes a la atmósfera, mientras nuestras minas, que producen carbón más limpio, permanecen cerradas”.