PREMIOS MUJER 2024

Una roca de origen asteroidal produce una bola de fuego al entrar en la atmósfera e impacta en la provincia de León

Una pequeña parte llegó a tierra en forma de meteorito en León, con un peso estimado inferior a 20 gramos
Meteorito Bierzo
Foto Archivo. El meteorito Traspena. / USC-CSIC

El Complejo Astronómico de La Hita, en Toledo, captó un espectacular fenómeno conocido como bola de fuego, que iluminó el cielo con una intensidad superior a la de la luna llena. Este brillante efecto fue visible en toda la Península Ibérica antes de su descenso en la provincia de León.

El astrofísico José María Madiedo, responsable del Proyecto SMART del Consejo Superior de Investigaciones Científicas, analizó el suceso. Se determinó que la bola de fuego se originó cuando una roca de un asteroide atravesó la atmósfera terrestre a aproximadamente 67,000 kilómetros por hora. El intenso roce con la atmósfera generó un aumento de temperatura que hizo que la roca se volviera incandescente. El fenómeno comenzó a unos 86 kilómetros de altura sobre Lomas, en Palencia, y avanzó en dirección noroeste, extinguiéndose a unos 23 kilómetros sobre Joara, en el municipio de Sahagún, alcanzando una visibilidad de más de 600 kilómetros.

A lo largo de su trayecto de 67 kilómetros, la roca experimentó varias explosiones, las cuales causaron aumentos repentinos de luminosidad debido a rupturas en su estructura. El análisis inicial sugiere que, aunque la roca no se desintegró por completo, una pequeña parte llegó a tierra en forma de meteorito en León, con un peso estimado inferior a 20 gramos.

Este fenómeno, conocido por los astrónomos como un bólido, fue presenciado por numerosos testigos que compartieron su experiencia en redes sociales. Asimismo, los detectores de la Red de Bólidos y Meteoros del Suroeste de Europa, que operan en el Complejo Astronómico de La Hita, también grabaron el evento.

Los mencionados detectores forman parte del Proyecto SMART, que busca monitorear constantemente el cielo y estudiar el impacto de rocas provenientes de diversos cuerpos del Sistema Solar. Este proyecto cuenta con equipos instalados en otros observatorios, como Calar Alto, Sierra Nevada, La Sagra, Olocau, Faro de Cullera y Marçà.

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