PREMIOS MUJER 2024

‘Un regalo envenenado’

Uno de los primeros policías de España en formar parte de la unidad de Estupefacientes y Comisario de la Nacional explica en el colegio San Ignacio la utopía de las drogas
Tomás Gómez Pérez, Comisario jubilado del Cuerpo nacional de Policía, hablándole a los alumnos de San Igancio

Tomás Gómez Pérez fue uno de los primeros policías de España en formar parte de la unidad de Estupefacientes, allá por el 68, cuando la unidad especializada todavía no existía y la alarma de las drogas empezaba a extenderse por todo el país como la pólvora. Llego a Comisario de Policía en Mallorca e incluso a trabajar para la Interpol, pero su gran lucha ha sido siempre contra las drogas. Primero como policía y, ahora, después de casi 50 años en la brecha, no ha tirado la toalla y trata,como orador, de acercar a los estudiantes algo de todo lo que ha aprendido en su larga carrera.

Este viernes, este leonés, nacido en Villafer, ha visitado el Colegio Diocesano San Igancio, pues le unen hondas raíces de amistad con el Bierzo y no desestima una oportunidad en su ‘guerra’. Los alumnos de 4º de. E.S.O fueron su auditorio, aunque a él le hubiese gustado más hablar con sus padres, “los ignorantes” como suele apuntar el expolicía. Y es que Gómez señala una y otra vez que los ‘chicos’ lo tienen casi todo aprendido en tema de drogas, “aunque no por la mejor vía, desde luego”, apunta. “No quiero que los padres se sientan ofendidos, pero normalmente son los últimos en enterarse de que hay un problema, y en qué consiste éste”. A ellos les recomienda su libro, ‘Utopía de las drogas…Un regalo envenenado’ o cualquier otra vía de infromación que les dé herramientas para luchar cuando las drogas asomen por el dormitorio de sus hijos, antes de que sea demasiado tarde.

A modo de resumen, la receta de Gómez es que los progenitores no rompan el vínculo del diálogo a los 8 años, “pues lo van a necesitar cuando aparezcan los problemas”. Vigilar las compañías, utilizar el amor, consistencia, persistencia, coherencia y aceptación son otros de los pasos que recomienda.

Y a los niños, ¿Qué les explica en sus charlas? Mucha información, de la buena, de la que solo te da alguien que sabe de lo que habla a fuerza de encontrárselo en la calle. Pero hay un argumento bastante potente entre sus palabras, además de las imágenes del documental que suele mostrar, y sería: “Niños, estáis siendo las cobayas de laboratorio de los traficantes”. Nada más que eso, cobayas. El argumento tiene su fuerza pues aleja al adolescente de creer que domina su vida y que consumir una droga es una muestra de fuerza y fruto de su voluntad. Y es la verdad, y la policía lo sabe, los jóvenes se convierten muchas veces en las pruebas de ensayo-error de los químicos que diseñan nuevas drogas y todavía no saben como van a funcionar.

Joven británico detenido por morder brutalmente a varias personas bajo el efecto de 'Canibal'
Joven británico detenido por morder brutalmente a varias personas bajo el efecto de ‘Canibal’ (Telecinco)

Gómez explica que para que una droga se considere como tal habrá primero de pasar al mercado, es decir, a la calle. Después los efectivos de policía a través de cualquier incidente hospitalario o ‘redada’ interceptarán esa sustancia y la llevarán a un laboratorio. A partir de ahí engrosa la lista mundial de estupefacientes si efectivamente está en los parámetros de lo denominado como droga. Y es que cada mes aparecen drogas sintéticas nuevas. Por ejemplo, la droga ‘Canibal’ nacida en 2004 y aparecida en España el pasado verano en la playa de Magaluf, Mallorca. Un turista británico prácticamente poseído tuvo que ser reducido por más de diez agentes ante su locura de morder a quien se le pusiera por delante, al más puro estilo The Walking Dead. O ‘La Flakka’ nacida este mismo año 2015 y que en seis meses ya estaba en España. La letal droga provoca alucinaciones, sensación de superfuerza y multiplica la agresividad.

Pero antes de todas estas drogas tan nuevas, hay una vieja conocida y que a Tomás Gómez le preocupa mucho: la marihuana. Por muchos llamada la reina de las drogas blandas, pero a Gómez se le encrudece la voz de pura convicción al atacar esta droga, y no precisamente por lo que ocurre cuando uno se fuma  ‘un peta’. Él la llama la droga de iniciación y cree que en muchas ocasiones marca el  inicio de la espiral. “Cuando los jóvenes la prueban, suelen tener un contacto positivo con las drogas y ven que no ocurre nada, explica, así qué cuando más adelante les ofrecen otra sustancia, su contacto con las drogas ha sido positivo y la aceptan”. Remarca que no quiere decir que todo el mundo que la pruebe acabe consumiendo otras drogas, pero “la mayoría de los que tienen problemas con otras sustancias, han empezado con el cannabis”.

Tomás Gomez Pérez, Comisario jubilado del Cuerpo nacional de Policía,
Tomás Gómez Pérez, Comisario jubilado del Cuerpo nacional de Policía,