PREMIOS MUJER 2024

Un niño de cada aula berciana sufre Asperger

La asociacón Aserle abre unas jornadas informativas en la Casa de la Cultura y denuncian que no existe cobertura suficiente para tratar este trastorno
Mesa presidencial de las jornadas de Asperle

EBD El trastrono neurobiológico de Asperger, emparentado con el autismo, afecta ya a un niño de cada aula berciana y es que la Asociación Síndrome de Asprerger y TGD’s de León (Asperle) contabiliza un millar de casos entre la Comarca y Laciana. “No estoy enfermo. Simplemente soy diferente”, con esas palabras responde el hijo de la presidenta de la asociación, Amparo Gavela, cada vez que alguien se refiere de forma equivocada a su síndrome.

El Asperger tiene una prevalencia de un caso por cada 270 habitantes según datos de la asociación que ayer inauguró sus jornadas informativas en la Casa de la Cultura de Ponferrda para dar a conocer como afecta en la vida de los niños o en otros familiares diagnosticados de este trastorno.

Los principales síntomas, exiplican desde Asperle, son chicos que hablan mucho, que tienen un lenguaje enciclopédico, que se obsesionan por saber mucho de un tema -algo que a veces lleva a confusión a los profesionales-, que como consecuencia les supone grandes problemas en sus relaciones sociales. No entienden la ironía, ni las metáforas y carecen en su gran mayoría de habilidades sociales al no entender, igual que el resto, las situaciones sociales. Gavela cuenta la anécdota de un adolescente que, aleccionado por su psicólogo sobre la forma de iniciar una conversación en una fiesta , le recomendó que dijera “vaya ambientazo que tenéis aquí”. Este usó, ingenuamente, la misma expresión cuando tuvo que asistir a un funeral.

Según la asociación, el trastorno está siendo correctamente diagnosticado a partir de los últimos años, en el Bierzo, gracias a un convenio con la Universidad de Salamanca para la diagnosis. Pero Asperler, reclama que el trastorno se trate de forma transversal afectando a otros ámbitos como el educativo, para que se atiendan sus singulares necesidades, o el sanitario. Hace unos años el síndrome estaba oculto y aunque algo se avanzado, Asperler desea concienciar e informar a la sociedad de las dificultades de estos individuos y hacer ejercicio de crítica con como trata el sistema a este tipo de diagnósticos.