Los vecinos de Santo Tomás de las Ollas se despertaron el pasado día de Reyes con la desagradable sorpresa de encontrar la decoración festiva en un estado lamentable. Los muñecos de nieve que daban la bienvenida al pueblo, junto a un Papa Noel en la glorieta de acceso, aparecieron con la cabeza arrancada, mientras que el carro de vacas, situado cerca de la iglesia y que sostenía varios árboles de Navidad y un centro con velas, estaba completamente desmantelado.
En cuanto a las posibles causas, el pedáneo, Carlos Fernández, sugiere que podría tratarse de una combinación del fuerte viento y la acción vandálica de algunos desaprensivos. “Creemos que parte de los daños se deben al fuerte viento que sopló durante la noche, como el pino que había en el carro de vacas. Sin embargo, también se han llevado muñecos que estaban atornillados, lo que claramente no puede atribuirse al viento”, explica Fernández.
El cierre de las festividades deja un mal sabor de boca, especialmente tras la alegría de que esta pedanía de Ponferrada fuera recientemente reconocida como la ganadora del concurso de decoración navideña organizado por el Ayuntamiento, donde se alzó con el primer lugar en la categoría de juntas vecinales.
Esta ambientación fue el resultado del esfuerzo y la creatividad de los vecinos, quienes utilizaron materiales reciclados para crear figuras y adornos. Un grupo de vecinas dedicó meses a construir decoraciones de manera artesanal, que luego distribuyeron por todo el pueblo. Sin embargo, la noche de Reyes esa labor comunitaria resultó gravemente dañada, dejando velas de poliestireno, bolas navideñas y otros adornos esparcidos por las calles.