Si te encuentras con tu vivienda ocupada al regresar de vacaciones, es importante conocer las vías legales disponibles y las diferencias que pueden existir según el tipo de vivienda (primera, segunda residencia o vacía).
1. Vía penal
Inicio: Se inicia con una denuncia en la Policía, Guardia Civil o en el juzgado de guardia. No requiere abogado ni procurador para la denuncia inicial, pero si deseas participar activamente, necesitarás ambos.
Delitos involucrados: La ocupación puede constituir dos tipos de delitos: Allanamiento de morada: Afecta a primera o segunda residencia y se pena con 6 meses a 2 años de prisión (más si hay violencia).
Usurpación: Afecta a inmuebles que no constituyan morada, con penas de multa de 3 a 6 meses.
Diferencias según el tipo de vivienda: Si la vivienda es tu segunda residencia, también se puede considerar allanamiento de morada. Si está vacía, se considerará usurpación, lo cual tiene penas menores.
Medidas cautelares: El juez puede ordenar el desalojo si existen pruebas suficientes y si la ocupación perjudica al propietario.
Acciones que no puedes realizar: No cortes suministros, no cambies cerraduras ni intentes desalojar por ti mismo, ya que podrías incurrir en delitos como coacciones o allanamiento.
2. Vía civil
Inicio: Requiere la presentación de una demanda con abogado y procurador, ante el juzgado de Primera Instancia más cercano, sin que haya transcurrido más de un año desde la ocupación.
Procedimiento: La Ley 5/2018 permite un procedimiento “exprés” que puede agilizar el desalojo. Sin embargo, la eficacia del procedimiento depende del juzgado y puede tardar entre 6 meses y un año.
Limitaciones: Esta vía está disponible para propietarios o poseedores legítimos, y no es aplicable en casos de arrendamientos impagos.
Conclusión
Ambas vías pueden ser efectivas, pero su éxito y rapidez dependen de varios factores, incluyendo la carga de trabajo de los juzgados. Si bien la vía penal puede ser más rápida si se adoptan medidas cautelares, la vía civil ofrece un procedimiento sumario que también busca la recuperación rápida de la vivienda. Sin embargo, ambos procedimientos pueden prolongarse, y es esencial evitar acciones que puedan volverse en contra del propietario legal.