Los dos acusados por un delito de desorden público registrado en julio de 2012 en Ciñera de Gordón en el transcurso de un enfrentamiento entre mineros y GRS, aceptaron hoy una pena de cuatro meses, sustituible por el pago de una multa de 1.200 euros, una cuantía que podrán abonar de manera fraccionada en cantidades de cien euros y de la que se hará cargo el fondo de la ‘caja de resistencia’ del colectivo minero.
El colectivo minero recibió con agrado esta reducción de la pena, ya que para cada uno de los dos acusados se pedían inicialmente 18 meses de prisión por estos mismos hechos. De hecho, a la salida de los dos implicados de la sede de los Juzgados de León, fueron recibidos con aplausos por parte del más de un centenar de personas que se había concentrado a las puertas del edificio para mostrar su apoyo a las dos personas que iban a ser juzgadas.
Desde los sindicatos, José Antonio Colinas recordó que los hechos por los que se iba a juzgar a los dos acusados ocurrieron hace cuatro años, por lo que consideró que tendrían que ser absueltos de los cargos que se les imputaban porque son “completamente inocentes”. A las puertas de los Juzgados quisieron expresarles su “total apoyo” para que pudieran “seguir con su vida” al ser personas que “viven la minería, saben lo que es ser minero y luchan por esto”, añadió.
Además, Colinas recordó que la detención de los dos acusados se produjo en julio de 2012 en una intervención que se produjo “dentro de un pueblo” algo que consideró que “no es ni medio normal”. Si la intención de los GRS era “liberar la carretera y la vía”, que habían permanecido varias horas cortadas como consecuencia de las barricadas organizadas por los mineros para protestar por la situación del sector, se podía haber hecho pero “sobraba entrar al pueblo a detener a nadie, y menos a estos dos compañeros y coger al primero que pillaron”, concluyó.