EBD Durante los últimos días, aprovechando su estancia en El Bierzo, la jugadora de Embutidos Pajariel Bembibre PDM, Rosó Buch, trabajó con dos de sus compañeras, Alba González y ‘Monty’, que llevan ya varias semanas entrenando a las órdenes de su entrenador, ‘Chiqui’ Barros. El ferrolano había diseñado un plan específico para las dos jugadoras, pero en las tres últimas jornadas se unió la escolta catalana, que se esforzó en demostrar su buena preparación, mantenida con un trabajo individual que desarrolla en su lugar de residencia.
En su regreso a la capital del Bierzo Alto, la de Mataró aseguró estar “feliz” por volver a pisar un Bembibre Arena que durante la última temporada disfrutó con sus genialidades, y a buen seguro lo volverá a hacer en la siguiente. Por su parte, sus compañeras coincidieron en ese sentimiento de felicidad, se congratularon por reencontrarse con una jugadora que siempre rezuma alegría y tiene una sonrisa en la cara.
No escatimó en elogios su entrenador, ‘Chiqui’ Barros, que hizo una valoración “muy positiva” de estas jornadas de trabajo junto a sus tres pupilas. “Siempre es gratificante trabajar con gente que se esfuerza tanto, que lo da todo en cada sesión de entrenamiento”, remarcó el preparador gallego, seguro de que las jugadoras “van a seguir creciendo durante la próxima temporada”.