El tenista Rafael Nadal ha ganado este domingo su decimocuarto torneo de Roland Garros, lo que eleva la suma de sus títulos de Grand Slam a 22, una cifra solo superada por Serena Williams (tiene 23) y Margareth Court (con 24).
La gesta del manacorí no tiene parangón en el tenis masculino y tras dos semanas en las que ha desarrollado un tenis impecable, las reacciones en cascada en las redes sociales de personalidades de todos los ámbitos no han parado de elogiar el quehacer de esta figura ya histórica, aunque todavía en activo, del deporte mundial.
En el Bierzo, como en el resto del mundo, Nadal despierta pasiones y entre quienes conocen el mundo del tenis, el ídolo balear merece todo su reconocimiento. La fascinación y el asombro es unánime entre los tenistas bercianos hacia la trayectoria de Rafael Nadal, sus dos semanas de torneo en Roland Garros 2022 y la perfecta ejecución de la final ante Casper Ruud, su oponente (“víctima”, se definió él mismo) en esta jornada de domingo.
Para el entrenador de tenis ponferradino Alfonso Cuevas Gómez, que dirige el club Wimbleon, que opera en la capital provincial y es una de las mejores escuelas tenísticas de la región, no cabe decir sino que “no tenemos palabras para describir lo que hace este hombre en la pista de tenis”. Se refiere, claro está, a “el gran Rafa”.
“Lo hemos enterrado 250 veces por lesiones y ahí sigue, con 36 años, ganando Grand Slams”, recuerda Cuevas, quien destaca del jugador manacorí que “pese a sus problemas físicos, ha sabido adaptarse con el paso del tiempo a lo que le demandaba el tenis: necesidades de mayor velocidad, pegarle mucho mas a la pelota y en definitiva, ser mas agresivo”. El resultado de esa evolución es exitoso, a juicio del técnico berciano: Nadal “lo ha conseguido y eso le ha permitido tanto seguir ganando tierra batida y como contar con muchas opciones de ganar en rápida, cuando siempre le costó mucho más”.
“Es impresionante lo que está logrando y esperemos que ese pie le dure un poco más para poder seguir compitiendo, porque lo que estamos viendo con él no se podrá ver nunca más”, concluye el entrenador Alfonso Cuevas.
Para el berciano Ramón Pardo García, entrenador que actualmente ejerce en Suiza y cuenta con dos libros de tenis publicados, el resultado de la final de hoy era casi previsible: “si Rafa [Nadal] está al 70 por ciento o más, gana seguro”. A juicio de este técnico, el manacorí “dependía más de su pie que del nivel que haya podido mostrar Ruud”. “Si Nadal está bien, olvídate”, piensa Ramón Pardo; “y si está medio mal, gana también. Tiene que estar totalmente jorobado para que puedan ganarle”, concluye el entrenador berciano.
Coincide en esta visión de la final Adrián Blanco Antelo, padelista de A Rúa que tiene Ponferrada como segunda casa y ocupa, en este momento, el número 62 del mundo en pádel. Desde Viena, donde se encuentra compitiendo, comparte que “Nadal fue muy superior” y desde su perspectiva, con años de rodaje en el deporte profesional como jugador, considera que a Ruud “le faltó expreciencia: ha hecho un torneo impresionante pero los nervios por tener delante a Rafa Nadal han hecho que el pobre no haya podido hacer mucho”. El resultado le da la razón: 6-3/6-3/6-0 se ha impuesto Nadal al joven noruego: “fue aplastante”, considera Antelo, para quien “la veteranía se hizo notar” pero sobre todo, marcó la diferencia “lo que es Rafa Nadal, que es más que un veterano”.
Desde luego, a Nadal no le faltan años en el circuito, si no, sería imposible que alcanzase estas cifras: con el Roland Garros conseguido hoy, “supera el 12+1 de Ángel Nieto y empata a 14 con el Real Madrid”, recuerda Jorge Lillo, encordador por cuyas manos ha pasado, entre otras muchas, la raqueta de Rafa Nadal. Para él, el noruego Ruud ha dado la talla “en los dos primeros sets” aunque Nadal “no le dejara sacar provecho de su derecha”. Con muchos lances habiendo pasado ante sus ojos, para Lillo “la gran diferencia entre los tres grandes [Nadal, Federer y Djokovic] y el resto es la capacidad de modificar su juego en medio de un partido cuando las cosas no van bien”. Para dar con un gran ejemplo de esta superioridad del llamado big-3, bastaría acercarse a los cuartos de final de este mismo campeonato de París: a juicio de el encordador berciano, “existen torneos en los que la final se juega antes de que llegue el domingo y este RG22 se jugó el martes”.
Comparte este parecer Alfonso Martínez Cedrón, conocido en la escena artística como Fon y que se ocupa en el Club Raqueta de Valladolid de transmitir su saber y su elegancia en la pista (en este caso, de pádel) a sus alumnos. Para este ponferradino, lo de que Nadal gane Roland Garros “no se puede decir que sea una sorpresa, porque siempre es favorito para ganarlo”.
Lo que sí que fue inesperado para él fue el partido de cuartos. Para Cedrón, también es la clave del campeonato, que cree que Nadal ganó de alguna manera “cuando derrotó a Djokovic, que venía de barrer a Schwartzman de la pista” dice. Visto eso, el Nole-Rafa “parecía que iba a ser como lo del año pasado, que casi fue una paliza, pero [Nadal] jugó muy bien ante Djokovic y el resultado sí que fue una sorpresa, entre comillas”, añade.
La diferencia de nivel y los nervios de Ruud habrían marcado a su juicio esta final. “Según he leído, hace 8 años [Casper Ruud] estaba allí de publico viéndole ganar su octavo, creo, Roland Garros y ahora jugaba contra él…”, señala Fon para enmarcar lo curioso del enfrentamiento de este domingo.
“Lo que sí es una sorpresa es que esté a ese nivel con lo del pie, que no sabemos muy bien qué es, pues no explican como lo tiene”, añade Alfonso Martínez, para quien lo que no es ni sorpresa ni incógnita al ver a Nadal “son unas ganas y una superación increíble”.
Para Azael Fernández, la raqueta más peligrosa que uno se puede encontrar actualmente en el Bierzo, “no es tan sorpresa que haya ganado [Roland Garros] sino las rondas que ha avanzado”. Tal y como explica este profesor del Real Club de Tenis Ponferrada, el cuadro del balear ha sido todo un desafío, “desde que ganó a Djokovic en cuartos, las semis con Zverev; ¿qué habría pasado si [el alemán] no se hubiera lesionado?”: para Azael la respuesta está clara: “Nadal ha tenido un tenis fabuloso para el poco rodaje que traía” y lo suyo “es una locura: no ha dado ninguna opción a Ruud en la final”. Como comenta el entrenador faberense, el rival de Nadal hoy no se ha visto por delante en el marcador en ningún momento. “Esperemos que siga todo el tiempo que pueda o que le permitan las lesiones así porque Nadal no hay otro y no habrá otro como Nadal. Así que a disfrutar de él”, sentencia, con no poca razón, el tenista y entrenador berciano Azael Fernández.
Otra figura del tenis berciano, Meni Puerto, capitán de la selección comarcal de tenis y promotor del Open de Villafranca, que está en plena disputa, también se quita el sombrero ante Nadal: “¡ya no encuentro adjetivo para definir a este deportista! Y mira que ya le han bautizado con todos los posibles”, exclama Meni Puerto.
Según este veterano, “debido a mi edad estoy seguro que no veré otro igual” (que Nadal), jugador por quien “la admiración que siento por él va más allá de lo deportivo porque creo que los valores que transmite están por encima del resto de jugadores, al igual que sus méritos deportivos”. Son “20 años de profesional y no hay una sola imagen donde se le vea un mal gesto o una raqueta rota”, recuerda Meni Puerto, para quien “eso ya lo dice todo”.
Sobre el futuro, prima el optimismo: “creo que a pesar de sus problemas en el pie, algunos ya lo enterraban antes de tiempo después de la aparición explosiva de Carlitos Alcaraz”, dice Meni, que reafirma su admiradción por Federer y Djokovic pero lo tiene claro: “la cabeza del de Manacor está por encima de ellos y en mi opinión es lo que le ha hecho estar un peldaño por encima de ambos”, asegura desde Villafranca.