El portavoz del PSOE en el Ayuntamiento de Ponferrada, Olegario Ramón, auguró este martes una subida del recibo del agua a consecuencia de la necesidad de acometer obras de saneamiento. El Consistorio ponferradino todavía mantiene 62 kilómetros de tubería de fibrocemento, prohibida desde el 2001, y para sustituirla se calcula que sería necesario invertir una cantidad cercana a los 60 millones de euros, a razón de casi 968 euros el metro aunque otros municipios lo han tasado en poco más de 300.
El importante desembolso municipal debería hacerse, según Ramón, a través de un plan plurianual, aunque de manera inevitable también supondría una subida de la factura del suministro. “El presupuesto de Ponferrada suele estar en los 50 millones de euros, muy fuera del alcance de la cantidad que habría que invertir. No hemos hecho los deberes antes pero tenemos que hacer un ejercicio de responsabilidad, sentarnos todos a negociar y ver cómo lo solucionamos ahora”, subrayó.
La alcaldesa de Ponferrada, Gloria Fernández Merayo, habría comunicado al portavoz socialista su disposición a abrir una vía de diálogo. “Espero que sea verdad y que no ocurra como otras veces que se apuesta por la política de imagen”, criticaba, al tiempo que recordó que del convenio con la concesionaria del agua solamente quedan disponibles 200.000 euros —de los últimos tres millones, 800.000 se gastaron en obras para el Mundial de Ciclismo— y lamentar que la mayoría de los 13 millones recibidos en su día no se aplicaran a la renovación de redes.
Una posible solución a la financiación de la inversión sería buscar ayudas económicas en administraciones superiores como la Junta de Castilla y León y el Gobierno.