La alcaldesa de Ponferrada, Gloria Fernández Merayo, anunció este jueves que la capital berciana cerró el ejercicio 2018 con un superávit de 14,5 millones de euros, un dinero que, en palabras de la regidora, “se podría haber empleado, entre otras cosas, en tener policías municipales”, pero “la oposición no nos ha dejado gastarlo”.
Fernández Merayo justificó así la decisión de contratar seguridad privada para la vigilancia de la Casa Consistorial, una opción que “a mí tampoco me gusta, lo ideal es que esté la Policía Municipal, pero no tenemos policías porque se van a jubilar y porque primero se rechazaron los presupuestos y después el acuerdo con la plantilla de personal que contemplaba 15 plazas de policía”.
La alcaldesa insistió en que la negativa de la oposición a sacar adelante ambos acuerdos es la que ha llevado a esta situación y pidió responsabilidad a los grupos municipales: “No se puede pretender tener menos policía y cubrir los mismos servicios. La oposición también tiene que tener responsabilidad en la marcha del Ayuntamiento y lo responsable habría sido emplear bien ese dinero. Es triste tener 14,5 millones de euros y que la oposición no nos haya dejado gastarlo”.
Gloria Fernández Merayo recordó que la decisión de recurrir a la seguridad privada “se plantea desde la jefatura de la Policía Municipal y la Concejalía” y su aprobación “está a la espera de lo que digan los servicios jurídicos municipales”.