El alcalde de Ponferrada, Olegario Ramón, presentó este jueves 7 de octubre la obra de ampliación del colector del polígono de La Barca, situado en la margen derecha del río Boeza, unos trabajos que cuentan con un presupuesto de 315.324 euros y que pone fin a “un problema importante importante relacionado con las aguas residuales”, debido a los vertidos incontrolados y problemas de malos olores que venían siendo denunciados desde hace más de una década.
Un problema que se producía en el barrio del Pedracal, que contaba con una fosa séptica a la que se vertía sin saneamiento, lo que “conlleva un riesgo de filtraciones” que provocaba una situación “complicada” y conocida desde hace mucho tiempo “para la que no se tomaron decisiones”.
Así lo explicó Olegario Ramón, quien se refirió a la intervención como “importante” y señaló que cuenta con cuatro meses de ejecución, por lo que “la obra de entidad ya está en marcha”. En concreto, discurre por el camino Matinot, en el tramo comprendido entre la calle Amalio Fernández y la carretera de Molinaseca. El colector tiene una longitud de 1.500 metros y se realizará con tubería de PVC de 315 milímetros de diámetro. La unión entre tubos se realizará con junta elástica y se ejecutarán pozos de registro para poder acometer las labores de exploración y limpieza. Para salvar el cruce de la carretera LE-142 hacia Molinaseca, de la que es titular la Junta, se utilizará la técnica de perforación horizontal dirigida, avanzaron fuentes municipales.
Una vez construido el colector, los operarios demolerán la fosa séptica ubicada en el barrio del Pedracal. Los trabajos consistirán en la extracción de fangos mediante un camión impulsor succionador y la retirada de la obra de fábrica de la fosa. El relleno hasta la cota del camino existente se llevará a cabo con material procedente de la excavación.
La conexión a los colectores existentes se hará mediante un bombeo y una vez finalizada la construcción del nuevo colector se acometerá el asfaltado de 7.000 metros cuadrados del camino con 20 centímetros de espesor, 15 de ellos de zahorra artificial tipo ZA-20 de 15 centímetros de espesor. Al mismo tiempo, se procederá a la renovación y ampliación de la red de abastecimiento, para lo que se soterrará la línea del alumbrado eléctrico.
Una ejecución que, para Ramón, “se incluye en un tipo de actuaciones no visibles a posteriori pero que son necesarias”, como señaló que lo es “la renovación de la red de fibrocemento desde la traída”, a la que “se procederá en cuanto se pueda”.