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A. del Campo / V. Silván | Ponferrada celebró este miércoles un pleno muy especial, alejado de la burocracia diaria y los enfrentamientos entre partidos. La casa de la cultura de la capital berciana fue el escenario del pleno infantil, es decir, del IV Consejo Municipal de la Infancia y la Adolescencia.
Un acto que consiste en un órgano colegiado de participación, de naturaleza consultiva, informativa y asesora en el ámbito local cuya finalidad es la de facilitar la colaboración de los menores residentes en el municipio por medio de sus representantes, también niños y adolescentes, en todas aquellas medidas o actuaciones que les afecten y ejercer de cauce de comunicación entre los menores y las autoridades locales.
Por ello, a la sesión plenaria no faltó nadie, desde el equipo de Gobierno del Ayuntamiento de Ponferrada hasta los portavoces de los grupos de oposición, pasando, cómo no, por los protagonistas del día, los niños y adolescentes de la ciudad, que mostraron sus inquietudes a partir de diferentes ruegos y preguntas con un marcado carácter social, y no solo a nivel local, ya que la preocupación por los refugiados de Siria estuvo presente en el acto.
Como reflejó una de las jóvenes portavoces, Clara, estudiante de 14 años del instituto de la Virgen de la Encina, que destacó entre las propuestas que llevaron a esta sesión la necesidad de mejorar la accesibilidad de los menores, la ayuda a los niños refugiados y la situación del colegio Ponferrada XII de Flores del Sil así como cosas “más diarias” como el estado de las aceras y sus baldosines.
“También les pediremos que nos faciliten más opciones de ocio en la ciudad porque nosotros también somos importantes”, apostilló Clara, que añadió que también realizarán un “control” de las propuestas que se llevaron al anterior Consejo para saber “si se han efectuado y cómo”.
“Es algo muy sano y enriquecedor”
Por su parte, la alcaldesa de Ponferrada, Gloria Fernández Merayo, reconoció que este es “uno de los actos que ya va cogiendo tradición” en el Ayuntamiento con su cuarta edición. “Me parece muy sano, es una manera de acercar las instituciones a los chavales, que vean que desde las instituciones y la oficialidad también se pueden cambiar las cosas, que se deben cambiar desde fuera y desde dentro, que son suyas las instituciones, que nosotros estamos ahí para gestionar y también para recoger sus sugerencias”, declaró la dirigente popular.
“Ya me gustaría tener a mí tener alguno en el Ayuntamiento, ayudándonos, seguro que iban a pegarle una marcha increíble. Por ello quiero invitar a todos los niños a que participen, que se presenten, que hagan sus sugerencias a través de cartas a la alcaldesa, interpelaciones a los concejales o de mensajes en el Twitter de cualquier edil o de la página web”, manifestó la alcaldesa.
Y es que para Merayo la aportación de los más pequeños puede ser esclarecedora: “Tienen otra visión de la realidad, muchas veces más práctica de la que tenemos los adultos, ellos ven la vida muy sencilla, saben ver muchas veces lo esencial que a nosotros, con el transcurrir de los años o las complicaciones, se nos escapa. Es muy sano y enriquecedor escuchar a los adolescentes. Yo tengo una hija de 14 años y ya no es una cría, son pequeños adultos. Iniciativas como estas son importantes para la ciudad y para ellos”.
