Paula Belenda es traductora e intérprete. Nació en Fabero y estudió en el instituto Beatriz Osorio para luego irse a Vigo a la Universidad. Por aquel entonces, logró una plaza Erasmus en Bruselas y en aquella metrópoli europea, donde personas de todo el mundo cruzan sus biografías, eclosionó en ella un interés por el mundo: “¿Qué son todas esas culturas, todos esos idiomas?”, recuerda que se preguntó. Allí comenzó lo que es su vida. Hoy, ha viajado a más de 100 países, ha vivido y trabajado en ocho (además de en España y esa residencia como estudiante en Bélgica) y ha montado su propia agencia de viajes. Con una peculiaridad: su negocio va dirigido a mujeres que quieran hacer rutas de aventura en Oriente Medio.
Suena imposible pero con esta berciana esa palabra diluye su significado. Paula asegura que sobre Arabia Saudí, Omán e Irak, países por los que habitualmente se mueve, existe una enorme desinformación; o, al menos, una información “que no está actualizada”. Tras viajar mucho por Oriente Medio, se dio cuenta de que empezaba a recibir consultas de información que demostraban el “desconocimiento de la zona”.
Por ejemplo: le preguntaban si para visitar Arabia Saudí es obligatorio vestir nicab (el velo que tapa todo el rostro excepto los ojos), cuando, asegura, allí una mujer occidental (ella lo hace y ha vivido mucho tiempo) puede vestirse como lo hace en España, siempre siendo prudente y cubriendo hombros y rodillas. Esa “desactualización” de la información que, entiende, generalmente se difunde sobre este país le ha llevado a situaciones que recuerda casi con risa, como la de un chico que le preguntó si habría algún problema en su visita a Arabia dado que él llevaba el pelo largo.
Al enfocar esta problemática, tan desligada de su experiencia, halló en la idea de su agencia una solución: tras viajar mucho por esa zona se veía capaz de hacer de puente hasta esa zona a las mujeres que quieran descubrir esa parte del mundo. Una agencia, además, que se especializara en rutas de aventura, un poco más allá de los circuitos turísticos. “Son países inusuales”, recuerda, pero además, dentro de lo inusual, cuenta con un equipo de guías para ir a lugares e itinearios algo más inaccesibles.
Se visita lo turístico pero también zonas remotas, donde se puede conocer a las familias, y sobre todo a las mujeres, de esas áreas y llegar a saber así cómo viven. Un turismo más humano: con esa idea nació “How I Met Travel”, su proyecto profesional tras años de trabajar de traductora hasta en ocho países diferentes. Son las personas que conocemos en nuestros viajes, dice Paula, lo que más allá de monumentos y lugares exóticos “deja un poso en nosotros”.
Siempre con perspectiva
En sus periplos por Oriente Medio (se quedó en Arabia Saudí una temporada a causa del coronavirus), la berciana Paula Belenda ha querido siempre acercarse a las mujeres de la zona. Son países, señala, “muy patriarcales” y es normal pasar la mayor parte del tiempo rodeada de hombres. Es por ello que ella siempre ha buscado ir un paso más allá, compartiendo tiempo con las mujeres tanto en sus viajes como en encuentros y charlas en los que las cuestiones de género y los tabús sexuales han estado presentes.
Es decir: esta faberense ha impulsado encuentros y talleres en varios países de Oriente Medio sobre igualdad en los que la menstruación, el uso de compresas y tampones, la virginidad o cualesquiera otros tabús relativos a la sexualidad femenina acaban sobre la mesa. También trata el papel de las mujeres a nivel profesional, como por ejemplo en un encuentro en Omán para concienciar sobre igualdad de género con trabajadoras del sector turístico, que señala que son muy pocas.
De hecho, algunos de los hilos a través de los cuales, deja entrever, podría tejerse alguno de sus proyectos futuros versa con esta falta de visibilidad; a saber: encontrando y tal vez formando mujeres para que trabajen de guía en esas rutas que organiza su agencia, esos viajes a Oriente Medio que quieren acercarse a la mujer y a las familias de esa tierra, más allá de una experiencia turística estándar.
Recuerdo de ese Fabero minero
A Paula le gusta volver a Fabero a reunirse con los suyos entre periplo y periplo, aventura y aventura. Si le piden que recuerde algo de su infancia y juventud en el pueblo la respuesta es clara: “la minería”, la gente, el bullicio, “más cosas sucediendo”. “La mina marcaba mucho”, afirma, y a muchos, entiende, pues piensa que al igual que ella (su padre y su abuelo), casi todo el mundo tenía un familiar cercano minero.
Cuando vuelve tiene sensaciones diferentes. Echa de menos ese bullicio y recuerda como lo mejor “el ambiente en las fiestas”, fechas especiales en las que intenta hacer su reapariciones en el pueblo. Como por ejemplo en Navidad, con su tradicional ronda de cortos de Nochebuena con sus seres queridos. Desde que no está en España le resulta más difícil hacer coincidir sus venidas con fechas especiales. Ahora bien: su vida en Oman, Arabia, Irak, su desarrollo personal, su cada vez mayor cúmulo de experiencia y conocimiento no restan un ápice a su sentir berciano y su cariño por su pueblo.
Una colaboración tremendamente especial
2021. Agosto. La atención pública mundial pone sus ojos en Afganistán, donde el repliegue norteamericano parece inminente y la caída de Kabul bajo el poder talibán es una cuestión de cuenta atrás. Por aquel entonces, se encuentra de viaje en dicho país una berciana muy especial, Paula Belenda, resuelta a conocer un poco más de la realidad de, en este caso, Asia Central. Con el empeoramiento de la situación, “se ponía todo muy tenso”, tuvo que salir del país. Dos semanas después, ocurre la toma de Kabul.
Pero la huella que Paula había dejado en las familias que conoció no iba a quedar en nada. Le escribían amigos y conocidos, preguntándole si podía echarles una mano para salir. Desde cero, “sin tener ni idea”, recuerda, empezó a preguntar con el objetivo de ayudar, de llegar al Ministerio de Exteriores o al de Defensa y conseguir salvoconductos para toda una familia.
Empezó con una petición de firmas vía internet para crear “su caso” y darle visibilidad, y fue entrando en contacto con medios de comunicación pequeños y medianos. Eso le permitió ir escalando hasta teles nacionales a la vez que contactando con políticos y autoridades. Dos semanas después, los salvoconductos “estaban en mi whatsapp”, recuerda con algo en la voz, tal vez el eco del temblor de aquella emoción, todavía presente cuando recuerda esos quince días tan intensos: “estaba súper contenta”.
Fue un “no me puedo creer que haya conseguido esto”: solucionar una situación “muy difícil”, que “era un acto de humanidad”. Lo mínimo “era al menos intentarlo”. Puso “toda su energía” y lo consiguió. Sabe que “le cambió la vida”, a toda una familia, que logró “un futuro más bonito y más pacífico”, relata.
Futuros proyectos
Conociéndola, cabe esperar de la vitalidad de faberense Paula Belenda que siga desplegándose, acercándose todavía más a los lugares recónditos donde se pueden conocer historias que nos amplían la visión de mundo. Y si la vida de esta berciana, nómada y luchadora, solidaria y optimista, da, como se dice, para ocho libros, es posible, dice, que pronto nos regale el primero.
“A ver qué tal”, dice de este proyecto editorial; “yo lo voy a intentar”, asegura, aunque le parece “súper duro”. Como cualquiera de su experiencia ante una nueva frontera, se siente con ganas.
Será un libro sobre historias de la zona de Arabia, donde se quiere centrar en relatar la parte humana de lo recogido en sus viajes. Esto no será óbice para que prosiga desarrollando los paquetes de viajes que oferta su agencia. Por ahora, explica, incluso sigue participando en ellos, para consolidar cada proyecto.
Oriente Medio seguirá contando con el interés de esta berciana por impulsar proyectos que visibilicen a la mujer, como esa idea, que por ahora solo está en fase embrionaria, de conseguir mujeres guías para ese trabajo generalmente hecho por hombres en esos trayectos por los que propone transitar a quien quiera viajar para abrirse y conocer dejándose sorprender por lo menos conocido.
Se trata, ese es el empeño de Paula, de conocer a la gente, no solo los monumentos. Tras haber vivido en España, Bruselas, Francia, Inglaterra, Hungría, Italia, Grecia, Emiratos Árabes y Arabia; con más de 100 países visitados y hablando francés, inglés, italiano, griego y árabe, esta berciana cosmopolita de alma noble y brillante como la antracita sigue queriendo tocar cada rincón del mundo, y que las demás lo hagan con ella, para poder continuar conociendo culturas y personas en el viaje que es su vida.
Premios Mujer Bierzo 2022
El Ayuntamiento de Fabero, presidido por Mari Paz Martínez ha propuesto a esta berciana como nominada a los Premios Mujer Bierzo 2022 que organiza El Bierzo Digital. Estos premios buscan reconocer y galardonar la encomiable labor de todas las mujeres y, especialmente, a las de nuestra comarca.
Puede conocer al resto de nominadas en la sección de reportajes de las candidatas a los Premios Mujer Bierzo 2022 de El Bierzo Digital.