Tres campeonas olímpicas de halterofilia, todas ellas kazajas, figuran entre los ocho deportistas descalificados por dopaje de los Juegos de Londres 2012, tras reanalizar el COI las muestras que conserva almacenadas. Zulfiya Chinshanlo, que ganó la categoría de 53 kilos, es positivo por los anabolizantes oxandrolona y estanozolol.
Maiya Maneza, ganadora en 2012 de la categoría de 63 kg, consumió asimismo estanozolol, al igual que Svetalana Podobedova, oro en los 75 kilos. Podobedova, que ganó la prueba en la que la española Lydia Valentín fue cuarta, ya había sido anunciada como positivo por su federación internacional.
También las ganadoras de la plata y el bronce dieron positivo, por lo que el triunfo será concedido a Valentín cuando se reasignen las medallas. También han sido descalificadas la bielorrusa Marina Shkermankova, bronce en 69 kg de halterofilia, por consumo de turinabol y estanozolol, y la cuarta en esa misma prueba, su compatriota Dzina Sazanavets, por drostanolona y estanozolol.
Los rusos Kirill Ikonnikov, que fue quinto en lanzamiento de martillo, por turinabol, y Dmitry Starodubtsev, cuarto en salto con pértiga, por el mismo esteroide anabolizante, y el bielorruso Yauheni Zharnasek, noveno en halterofilia +105 kg, positivo por turinabol, oxandrolona y estanozolol, completan la relación de descalificados hecha pública.
El COI ha archivado, en cambio, el caso del ruso Besik Kudukhov, plata en lucha libre 60 kg y que murió en diciembre de 2013. Sus muestras arrojaron un positivo por turinabol, pero “no se puede seguir un procedimiento disciplinario contra una persona fallecida”, según la comisión disciplinaria encargada del caso.