Nueva decepción en El Toralín

Esa gran afición con la que cuenta la Sociedad Deportiva Ponferradina se acercó una jornada más al estadio de El Toralín con la ilusión de ver que el equipo de sus amores le iba a dar una satisfacción, pero no, pues como viene siendo habitual salieron del recinto ponferradino totalmente decepcionados tras ver que no fueron capaces a lo largo de los 90 minutos de marcar un gol a un flojo equipo como es el Lealtad de Villaviciosa, que conlleva el llevar cuatro jornadas sin conocer la victoria, es decir, derrota en Pontevedra, 2-0, empate en El Toralín ante el Racing de Ferrol, 1-1, empate en El Plantío frente al Burgos, 0-0, y el citado empate ante el Lealtad, 0-0.

Tres puntos en cuatro partidos es un pobre bagaje para un equipo cuyo único objetivo es meterse en los puestos que dan opción a disputar la fase de ascenso a Segunda División A, categoría donde la Deportiva militó cuatro temporadas consecutivas, 2012-13, 2013-14, 2014-15 y 2015-16, pero que se perdió en la última jornada de la temporada 2015-16 al perder en El Toralín con el Girona cuando sólo le valía la victoria para continuar una temporada más en la categoría de plata del fútbol español.

Bajar, como bien decían algunos aficionados este domingo, es fácil, pero ascender es bastante más  difícil, como muy bien sabe la SD Ponferradina en etapas anteriores. Es cierto que ante el conjunto asturiano del Lealtad se mereció algo más que ese empate a cero final que reflejaba el marcador, pues sobre todo en la primera parte el dominio fue aplastante del conjunto blanquiazul, mientras los asturianos hicieron que el cancerbero Dinu Moldovan se convirtiera en un mero espectador, pero claro, como muy bien decía el entrenador de la Ponferradina, Pedro Munitis, en la rueda de prensa del pasado viernes, ‘en fútbol todo consiste en meter el balón en el portal contrario’, y eso es lo que le falta a la Deportiva, marcar, pero en esa faceta atacante anda muy pobre la Ponferradina.

Pese al empate el conjunto blanquiazul sigue en el 6º puesto de la clasificación con 26 puntos, a cuatro del Pontevedra, equipo este que no pasó del empate ante el Coruxo, y que es el equipo que marca el último puesto de la fase de ascenso, pero bien se pudo poner a dos si el resultado final hubiera sido de victoria del conjunto blanquiazul, máxime al tener enfrente un rival muy inferior al equipo que dirige Pedro Munitis. El objetivo no está lejos, pero para ello el equipo tiene que dar una imagen muy distinta a la ofrecida este domingo ante el Lealtad. El próximo domingo a las 12:00 horas en el Anexo al José Zorrilla, ante el Valladolid B, tienen una buena oportunidad de resarcirse de este inesperado traspié, pero para ello tienen que jugar mejor que lo han hecho en esta jornada.