Juan Dos Santos es hijo de caboverdianos que emigraron a España para trabajar en la mina, en busca de una vida mejor. Nació en Ponferrada, “porque era donde estaba el hospital”, pero pasó su infancia en la capital de Laciana, Villablino, hasta los 11 años. La jubilación de sus padres trajo a la familia a la capital de la comarca vecina del Bierzo, mientras otros compatriotas se iban a Torrevieja o Madrid. “Me siento de los dos sitios. En Villablino tuve una infancia maravillosa y aquí tuve una adolescencia maravillosa también. No tengo predilección”, cuenta en una entrevista a El Bierzo Digital.
Entre sus recuerdos más felices está la búsqueda incansable de fósiles en la escombrera con sus dos hermanas mayores y escalando árboles. Le fastidió, “como a todo niño”, el cambio de amigos que supone una mudanza “pero vi que podía crecer un poco. A mí siempre me gustó interpretar y en Villablino no había opciones. Aquí, en Ponferrada, me encontraba muy cómodo y podía hacer muchas cosas que me gustaban”.
Con 7 años hizo su primera actuación. Se metió en la piel de Michael Jackson en una actuación escolar en el Centro de Educación Primaria San Miguel de Villablino que emocionó al público y al profesorado. Tanto que le pidieron que repitiera el espectáculo para los alumnos del instituto lacianiego. “Ahí empezó todo. Yo siempre supe que mi vida iba a estar encima de un escenario de una forma u otra y eso es por lo que luché, por lo que me formé y por lo que me gustaría y quiero vivir”, dice orgulloso.
Pregunta. ¿Cuándo empiezas a prepararte en serio en tu carrera como actor?
Respuesta. Empecé con clases de canto en Vida y también en el IES Álvaro de Mendaña. Había una optativa que era ‘Teatro’, nos la daba Cruz, y ahí vi que tenía una fantasía enorme y podía hacer un montón de cosas. Luego abrieron la Escuela de Cine y me apuntaba a todos los cortos para los que hacían castings.
Seguí los pasos de mis hermanas. Ellas empezaron en el mundo del modelaje y casi obligado empecé por ahí también. Era alto, espigado… Me presenté a Mister León, gané y me fui a Mister España en 2009 y fui el primer leonés que ha llegado a la final del certamen. Siempre seguí esas pautas hasta que hubo un momento que dije ‘Juan, o te marchas de Ponferrada o vas a seguir aquí trabajando o en hostelería o en LM o en Ipauto…’ En trabajos que no me sentía realizado, trabajaba porque había que trabajar y siempre tenía en mi cabeza ‘Elige el trabajo que te gusta y no trabajarás nunca’. Decidí marcharme a Madrid con 25 años. Le dije a mi madre que me iba una semana y nunca más volví.
P. ¿Cuál fue tu primer trabajo en la capital?
R. Hice un spot publicitario para BBVA aunque el trabajo más gordo que hice fue con mi hermana para los centros comerciales JC Penney y otro de los importantes fue un anuncio con Penélope Cruz, Miguel Ángel Silvestre, un montón de modelos top. Fue para un anuncio de Agent Provocateur de ropa interior.
P. ¿Es fácil llegar a la ‘gran ciudad’ y encontrar trabajo?
R. Para mí no lo fue. Siempre hay los típicos casos de alguien que va andando por la calle, lo ve un director y dice ‘Me encajas en el perfil’, pero yo creo que eso debe existir para una o dos personas. Yo me lo tuve que currar un montón. Mi vida durante cuatro años que me estuve formándome para interpretar me despertaba a las ocho de la mañana y llegaba a casa a las tres de la madrugada. Así de lunes a sábado.
Como todo esfuerzo tiene su recompensa fue hacer mi primera obra de teatro y salirme una representante. Eso fue lo más gratificante que pude tener desde el principio, por eso seguía. Quise dejarlo y buscar otra forma de ganarme la vida pero continué hasta día de hoy.
P. ¿Cuánto tarda uno en ver un poco de luz en la carrera como actor?
R. Si me pongo a pensar desde cuándo gano dinero con el que puedo llegar a algo es desde la primera película porque hice obras de teatro pero no eran remuneradas. Las hice por moverme y que la gente me viese.
La película que se preestrena este jueves en Madrid y se estrena en cines este viernes 1 de marzo se llama ‘4 Latas’, del director Gerardo Olivares. La película la protagonizan Jean Reno, Hovik Keuchkerian, Francesc Garrido y Enrique San Francisco. Son cuatro amigos que de jóvenes se dedicaban a comprar 4 latas en España y venderlos en Tombuctú, en Mali, en Senegal… como forma de negocio. Cuando empiezan a cumplir una cierta edad cada uno hace su vida y Enrique San Francisco se queda en Tombuctú. Pasan los años y pierden el contacto pero un día se enteran de que Enrique San Francisco se está muriendo y deciden ir a buscarlo para hacer un último viaje en el 4 latas todos juntos.
Mi personaje es un emigrante al que toda su aldea le da dinero para que cruce a España, trabaje aquí y les mande dinero para tener una vida mejor pero soy un fracasado. Intento cruzar varias veces y a la quinta vez me quedo enganchado en las vallas de Melilla y trato de regresar a mi país. Como no puedo veo ese coche que va viajando hacia el sur de África y me meto en el maletero que es en el que transcurre el viaje. Soy un fracasado pero a la vez un héroe. Y pasan un montón de cosas, que no voy a contar para que vayáis a ver la película.
P. ¿Te llaman un día y te dicen ‘Juan queremos que hagas una película’?
R. No, ¡qué va! (se ríe). No me querían porque soy mulato, no negro. Fui a hacer el casting con los pantalones todos rotos, con pulseras y me puse a dar las réplicas con acento de Mali que me lo preparé en casa por si sonaba la flauta. Ese día me fui a cenar con el director, que es el único español que tiene el premio a la Espiga de Oro, y no podía casi articular palabra, ya casi lo tenía hecho. Y al final me dio el papel.
P. ¿Cómo preparaste el papel?
R. En este mundo no vale con ser un buen actor. Tienes que encajar perfectamente en el molde del perfil que buscan. Tengo muchos casting que me han quitado porque soy muy alto, porque estoy muy fuerte, en uno me han dicho que soy muy guapo… ¡Parece que es malo! Son cosas que al fin y al cabo te joden.
En esta película lo bueno que tuve es que este director apostó por la interpretación que yo estaba dando, no por un físico. Estaba con 90 kilos cuando hice el casting, no me querían porque soy muy mulatito y para que me cogieran el director me puso como condiciones que tenía que perder bastantes kilos, que perdí más de 10, porque mi personaje está vagando por el desierto, y ponerme más negro. ¡Tuve que ir a rayos UVA!
A parte del cambio físico la preparación del personaje lo tuve un poco más fácil porque como era un personaje emigrante simplemente tuve que preguntar a mi madre y a mi tía cómo vinieron de Cabo Verde aquí. A raíz de ahí fui construyendo un personaje, llevándolo por las historias que me contaba mi familia. No fue lo mismo porque mi personaje tuvo que cruzar en patera y mi madre vino en avión hasta Lisboa pero de Lisboa a Villablino fue en coche escondida detrás para que la Policía no la viese y el miedo es el mismo. Fue un poco cambiar el nombre de Mamadú por Julia, mi madre. De hecho el director no me dirigió, me dejó que llevase el papel por donde yo quisiese.
Juan Dos Santos en el rodaje de la película ‘4 Latas’
P. ¿Cuesta creer que te eligieron a ti?
R. Es una industria dura la del espectáculo. Las industrias no apuestan por caras nuevas. Si estoy compitiendo con Miguel Ángel Silvestre él es el que vende. Ya puedo ser mejor actor que lo van a elegir a él. Es una profesión muy difícil. En mi caso además es difícil encontrar papeles porque ‘¿Qué papel va a hacer un negro siempre?’ El de inmigrante. Vivimos en un mundo en el que el negro es un negro mantero, un negro camarero, un negro chungo, y pocas veces o muy pocas se ve a un negro doctor o abogado… Pero van cambiando los tiempos y poco a poco vamos siendo un poco más visibles. Pocas veces en España he visto que un negro tenga tanto peso en una película como en esta de ‘4 Latas’ en la que mucho gira en torno a Mamadú.
En Puente Viejo (serie en la que actúa) soy un negro rico. ¿Quién iba a decirlo? Creo que estamos en un buen año para que se empiece a ver el cambio. Tengo grabados 47 capítulos y luego ya se verá lo que pasa con mi personaje porque hay personajes fijos que tienen sus tramas y el público los quiere. A ver cómo funciona el mío pero estoy feliz.
P. Ésa ha sido tu primera serie televisiva pero no la última. Ya has rodado otro capítulo para una serie de TVE, ¿no?
R. Sí, voy a salir en un capítulo de la serie ‘Hospital Valle Norte’ en el que además salgo con mi hermana Eugenia. Somos inmigrantes que venimos de Sierra Leona y nos llevan a Francia entonces como mi mujer, que es mi hermana, está embarazada, nos echan del camión en el que viajamos y nos dejan a la intemperie hasta que vienen los doctores que nos ven y nos salvan y ahí lo dejo.
Juan Dos Santos en la serie ‘El secreto de Puente Viejo’ de Antena 3
Juan Dos Santos en la serie ‘Hospital Valle Norte’
P. A partir de ahora, ¿dónde pones la meta?
R. A partir de ahora ya no es ‘Te voy a presentar a Juan Dos Santos’, hacer un buen papel en esta película me posibilita el ‘Llama a Juan Dos Santos’. Hay más gente que me va a tener ya en su agenda. Es lo mejor que puedo tener. Estoy agradecido por cada papel.
Después de esto lo que quiero es seguir trabajando. Siempre me he marcado retos. No espero el reconcimiento ni la fama, quiero sentirme bien yo mismo. Lo que tengo que hacer y que me queda, no sé cómo pero lo voy a hacer, es un musical.
Tengo uno pendiente que tiene mucho valor sentimental. Lo hemos hecho ya dos veces y llenado el teatro del barrio de Malasaña y ahora el director Eduardo Recabarren quiere hacerlo a lo grande. Es una adaptación de ‘Jesucristo Superestar’ y ‘Marcelino Pan y Vino’. ¡Una locura enorme que se creó! Tengo ese proyecto pendiente y un sueño que tengo es entrar en El Rey León.
P. Además de interpretación aspiras a musical y danza…
R. Una cosa que hice bien fue formarme en todo porque ahora mismo ya no sirve solo con interpretar. Vas a un casting y te piden cantar, bailar, montar a caballo, un montón de cosas. Yo me he formado en todo por si algún día me salía un casting y que no me pudiesen echar por no saber hacer algo. Por eso no he tenido vida porque me he formado mucho y sigo formándome.
Del musical ya se está escribiendo el guión y me han propuesto otra obra de teatro para empezar a ensayar en marzo, ‘Las preciosas ridículas’ pero luego tengo otros casting hechos y pendientes de confirmar. Tuve la suerte de conocer a uno de los productores de Netflix y a ver qué sale… No puedo decir nada.
P. Y lo de volver al Bierzo o a Laciana, cómo lo ves.
R. No. Volvería si tuviese una mujer e hijos porque para criar a mis hijos sería el mejor sitio, cualquiera de las dos comarcas. Son zonas tranquilas, bonitas, con campo… En Madrid es imposible, no hay parques, no hay verde. Luego ya me iría a trabajar a Madrid y volvería pero está complicado porque todo está en Madrid, aquí no hay trabajo como actor a pesar de que se hacen cosas.
En Ponferrada siempre ha gustado mucho el teatro, la cultura… Y para el momento económico actual está muy bien. Está la escuela VIDA que hace obras de teatro y es maravilloso para la gente que está empezando, que les formen en canto, en interpretación y en danza. Tendrían que darle más ayudas.
Pero también es verdad que Ponferrada es una ciudad con muchos artistas y todos están en Madrid. Tienen que salirse de aquí para trabajar. En todos los casting siempre me encuentro a alguien de aquí.
El preestreno de la película ‘4 Latas’ será este jueves 28 de febrero en Madrid y se podrá ver en cines a partir del viernes 1 de marzo. El trailer a continuación: