El alcalde de León y precandidato a la presidencia del PP autonómico, Antonio Silván, recibió este jueves un nutrido apoyo de militantes y cargos del partido en el acto que celebró en la sede provincial para despedir la campaña en la ciudad, ya que esta tarde protagoniza sendos actos en Burgos y Palencia, donde tendrá lugar la clausura oficial.
El aspirante se mostró satisfecho con la respuesta que está recibiendo en su recorrido por la Comunidad e insistió en su intención de dotar de protagonismo a los afiliados para conseguir un partido más participativo. “Me comprometo a trabajar para que tenga lo que se merece en el seno del partido. Vamos a luchar en todos los ámbitos para que sea un partido mucho más abierto e implicado en la sociedad y participativo. Quiero un debate permanente en las sedes, quiero que los afiliados participen, aporten y que el partido sea un partido vivo desde abajo, desde los que trabajan diariamente por él”, subrayó.
Silván abogó por lograr que la formación funcione con “más calle y menos despachos. Que el afiliado participe permanentemente en la vida del partido” del que les considera la piedra angular. Esa intención que remarcó como compromiso firme responde, dijo, al mensaje que los militantes le han trasladado estos días en los actos llevados a cabo en todas las provincias de Castilla y León.
También se refirió al hecho de que no estar al día en el pago de las cuotas vaya a reducir sensiblemente el número de votantes en la elección al sucesor de Juan Vicente Herrera al frente del PP en la Comunidad. A su juicio, “no debe haber diferencias, si queremos un partido participativo e implicado. Sirven para sostener los gastos ordinarios pero no puede ser una limitación de voto”, por lo que propone una cuota de afiliado lineal para todas las provincias.
El pre-candidato comentó que el sistema de elección que el PP ha decidido -con limitaciones y defectos asumidos por todos, dijo- traslada a la sociedad el mensaje de que el partido ya está cambiando y de que se han puesto las bases para hacerlo aunque quede mucho camino.