A Marisa Baelo no se le pasaba por la cabeza dedicarse al negocio familiar, una pequeña destilería en Quilós, cuando abandonó el pueblo para irse a estudiar Derecho a Madrid. De hecho, estuvo varios años trabajando en despachos de abogados de la capital y después en Ponferrada, pero el destino tenía reservado para ella un puesto al frente de Aguardientes Baelo y de la casa rural El Lagar.
“Definitivamente, no pensaba que este fuera a ser mi futuro”, confiesa, “cuando me fui a Madrid no contemplaba seguir el negocio familiar. Sin embargo, volví cuando mi madre se puso enferma. Ella era el motor de la familia y decidí que era más importante mi madre que mi carrera profesional. Vocación de aguardentera no tenía, pero me supe adaptar”.
Tanto y tan bien se adaptó que actualmente es la gerente de Aguardientes Baelo, constituida en Sociedad Limitada desde 2005, y también se encarga de la casa rural El Lagar, los dos proyectos que empezó su abuela y su madre consolidó a lo largo del siglo XX. Ahora, su objetivo es convertir lo que fue un pequeño negocio familiar en una empresa moderna adaptada al siglo XXI.
60 años de Aguardientes Baelo
La historia del alambique de Quilós comienza 60 años atrás, cuando la abuela de Marisa Baelo lo adquirió a sugerencia de un familiar y lo convirtió en una iniciativa empresarial. Luego pasó a su madre, que le dio el impulso necesario: “Mi madre era el alma de la empresa y desarrolló el proyecto del negocio del aguardiente. Era una persona muy curiosa e inteligente”.
Siempre atenta a las oportunidades, de forma paralela a la destilería decidió apostar por el turismo rural cuando ese nombre apenas tenía resonancia: “En Quilós se cultivaba mucho tabaco y mi madre no quería que se abandonaran las casas que se utilizaban como secaderos. Vio que aquello podía tener futuro para el turismo rural, que estaba empezando allá por el 96, y comenzó a restaurar primero la casa grande, luego un apartamento que era la casa de mi abuela y después hizo cuatro habitaciones de lo que era un pajar. Y todo lo hizo con recursos propios, sin subvenciones, simplemente mucho trabajo, dedicación y compromiso con el negocio. Era excepcional como empresaria”.
De este modo, consiguió una curiosa simbiosis entre las dos partes de su negocio: “A los viajeros les enseñamos el alambique y a los que vienen al alambique les enseñamos la casa. Tienen mucha vinculación las dos cosas”, asegura Marisa.
El salto de los Baelo a la empresa moderna
En 2005, Marisa y su hermano forman la empresa Aguardientes Baelo SL, dando el salto del negocio familiar a la empresa moderna, aunque sin perder los vínculos de sangre: “Mi marido y yo nos dedicamos a la parte comercial: pedidos, venta al público, redes sociales… Mi hermano, que estudió Química y Enología, se encarga de la parte técnica, y mi cuñada es la que lleva el tema administrativo”. Eso sí, “Al final haces un poco de todo, si toca embotellar o etiquetar, también se hace”.
Abrirse paso en el mercado más allá de las fronteras del Bierzo es el siguiente paso que quiere dar Marisa, que reconoce que “vendemos mucho en casa, de boca a oreja y clientes de toda la vida, pero como no salgamos un poco más, nos vamos a quedar pequeños. Tenemos alguna tienda, como la de La Moncloa u otra en León, pero de momento vamos poquito a poco”.
Los pasos cortos casan bien con su campo de trabajo, ya que “hacemos licores, orujo envejecido en barrica de roble… Lo que tiene esto es que lleva su tiempo, no es un producto que se haga de hoy para mañana, tiene un proceso de maceración, envejecimiento… hay que tener paciencia”.
Emprender en el mundo rural
Sacar adelante una empresa en el medio rural tiene su encanto, pero también sus dificultades, que Marisa Baelo comparte con muchos otros pequeños empresarios del Bierzo: “Ayudas fiscales siempre vienen bien, pero también comunicaciones, tanto carreteras como telecomunicaciones, que es lo que más se echa en falta”.
A la hora de animar a otras personas a seguir su camino, Marisa tiene claros sus consejos: “Que se formen mucho porque es un mundo muy duro y cuanta más formación tengas, más acceso tendrás a conocimientos, a contenidos y también a otras personas”, pero sobre todo, “mucha paciencia y tener mucha iniciativa”.
Premios Mujer Bierzo 2023
La Asociación para el Desarrollo del Bierzo (Asodebi) ha propuesto a esta empresaria de Quilós como nominada a los Premios Mujer Bierzo 2023 que organiza El Bierzo Digital. Estos premios buscan reconocer y galardonar la encomiable labor de todas las mujeres y, especialmente, de las de nuestra comarca.
ESTOY SEGURO DE SU TRIUNFO Y CON TODO EL AGRADECIMIENTO DE SU AMIGO E INSPECTOR DE SANIDAD DURANTE MUCHOS AÑOS