Manuel Ferreiro presenta tres propuestas “realizables” para mejorar la despoblación en el municipio

El candidato por UPL a la alcaldía de Ponferrada, Manuel Ferreiro, acompañado por el procurador en las Cortes, José Ramón García, han presentado la mañana de este martes una serie de propuestas “sencillas pero realizables” que ayuden a mejorar “las estadísticas que venimos arrastrando” sobre la despoblación en el municipio. Para comenzar, Ferreiro ha querido hacer una “pequeña” reflexión asegurando que “con los políticos del Ayuntamiento de Ponferrada no podemos hoy ir a ninguna parte”.

La primera de las propuestas presentadas, “sencilla, ambiciosa y realizable”, se trata de una actuación en la avenida de La Puebla, creando una bolsa de aparcamientos con capacidad para 32 coches. De esta forma, el regreso desde Correos a la Plaza Lazúrtegui por esta calle se realizaría por la calle Río Urdiales y en la parte izquierda de la avenida (mirando hacia Correos), crearían 32 plazas de aparcamiento descontando ya las cargas y descargas y los pasos de peatones. Entre estas 32 plazas, aproximadamente 2 serían de minusválidos.

La segunda propuesta tiene que ver con el Mercado y la Plaza de Abastos, cuyo principal enemigo, afirma Ferreiro, “han sido siempre los políticos”. En primer lugar, piden derogar inmediatamente la ordenanza que data de 2002 “y está anticuada”, con un sistema de concesiones “que tiene que terminarse”. El objetivo es “atraer a gente joven al mercado, con una ordenanza nueva con alquileres que ayude a la gente joven”, apunta. En segundo lugar, proponen la creación de un supermercado que no tenga alimentos perecederos en la planta número 1 de la propia plaza, junto a los gastrobares. Para esta propuesta han encargado un estudio “que lo ve totalmente viable”. Tendría una superficie de 200-300 metros cuadrados, un ratio de influencia de 500 metros y casi 10.000 consumidores.

La tercera y última propuesta es sobre el medio rural. En este caso, proponen que Lombillo, Villar y Salas de los Barrios “dejen de estar refundidos en un solo pueblo con un solo alcalde”. Ferreiro se compromete a que “cada uno de los pueblos tenga un alcalde de barrio y si quieren también, habilitar las Juntas Vecinales”.