El presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, anunció este lunes que mañana, 15 de octubre, se aprobará el techo de gasto para 2025 en un Consejo de Gobierno extraordinario, paso previo a la presentación del anteproyecto de ley de los Presupuestos Generales de la Comunidad. Según adelantó Mañueco, estos presupuestos serán “los más altos de la historia” y destinarán un 81 por ciento de los recursos a áreas clave como sanidad, educación, servicios sociales, dependencia, conciliación y vivienda.
Durante la inauguración de la jornada ‘Castilla y León hacia el futuro’, organizada por Europa Press, el presidente hizo un llamamiento a los grupos políticos, solicitando “altura de miras” y un espíritu constructivo en las negociaciones. Además, subrayó que su gobierno mantiene una clara apuesta por los servicios sociales, lo que se refleja en la importante partida presupuestaria destinada a estos sectores.
Mañueco indicó que, tras la aprobación del techo de gasto, el consejero de Economía y Hacienda, Carlos Fernández Carriedo, se reunirá con los distintos grupos parlamentarios para buscar consensos. Expresó su esperanza de que estos encuentros se lleven a cabo “pensando en Castilla y León y no en estrategias de partido”.
En su intervención, también hizo alusión directa al PSOE de Castilla y León, pidiendo que se centren en la comunidad, “pese a sus líos internos”, y a Vox, a quienes invitó a trabajar por la región en lugar de seguir las indicaciones de “sus jefes de Madrid”. “Por nuestra parte no va a quedar, sabemos dialogar”, afirmó.
La jornada contó con la presencia de varios consejeros del gobierno regional, procuradores y representantes de los agentes sociales y económicos, como el presidente del Consejo de Cámaras, Antonio Miguel Méndez Pozo.
Castilla y León funciona
En su intervención, el presidente de la Junta defendió que Castilla y León funciona porque tiene unas “cuentas saneadas”, una economía dinámica, ayuda a las empresas y trabajadores, a los sectores estratégicos como el agrario y automoción, crea empleo, tiene servicios públicos solventes y la mejor política de familia y natalidad.
“Los datos son la mejor tarjeta de presentación y para fijar población”, aseveró el presidente, convencido de que son los datos, como 41 meses consecutivos de descenso del paro interanual y 42 meses de subida de los afiliados a la Seguridad Social, los que atestiguan que Castilla y León es “una realidad pujante en el panorama nacional” con innovación, dinamismo y personas de valía que forman el tejido social e institucional, a lo que unió un Gobierno estable, pese a estar en minoría.
Ante el problema de la vivienda, puso en valor políticas útiles de ejecución de 4.000 casas de alquiler social y deducciones en la compra y en el alquiler, en concreto con 40 millones que llegan a 18.500 familias y 1.800 mayores que pueden seguir en sus viviendas y 5.000 jóvenes que se pueden emancipar. “Políticas útiles frente a la imposición y amenaza del Gobierno”, zanjó.
“Esto es el resultado y trabajo de la sociedad de Castilla y León, de sus nueve provincias”, razonó el presidente, que aseguró que su Gobierno cumple con sus objetivos, es responsable y leal en el ejercicio de sus competencias, para subrayar la apuesta por el diálogo en todas sus vertientes.