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Los senadores populares leoneses ayudarán a los jubilados venezolanos que no reciben en España su pensión

Los parlamentarios leoneses se reúnen con la Asociación de Pensionistas y Jubilados venezolanos
Imagen de la reunión entre los senadores leoneses y representantes de jubilados venezolanos. / EBD

Los senadores del PP por León se comprometieron este miércoles a colaborar en la resolución de los problemas que el gobierno venezolano ha generado a los pensionistas y jubilados a los que ha dejado de ingresar su pensión en las cuentas bancarias españolas y no les permite realizar transferencias monetarias al exterior. Los parlamentarios Luis Aznar, Ester Muñoz y Alfonso Rodríguez-Hevia se reunieron hoy responsables de la Asociación de Pensionistas y Jubilados venezolanos, según informó el PP en un comunicado.

En particular, los representantes de la Asociación expresaron su preocupación ante el hecho de que el gobierno de Venezuela, de manera deliberada, decidiera hace ya más de un año dejar de ingresarles la pensión en sus cuentas bancarias españolas para hacerlo en las cuentas de la misma entidad bancaria pero en Venezuela. Además, el ejecutivo de Maduro no permite transferencias monetarias al exterior y si en el plazo de tres meses el dinero no se retira, éste desaparece.

Asimismo, el PP sostuvo que la situación de estas personas se agrava debido a que Venezuela impide además que otros países como España puedan conceder ayudas urgentes a estos ciudadanos al negarse a expedirles en sus embajadas y consulados el certificado que acredite su condición de jubilados o pensionistas, requisito indispensable para acceder en España a cualquier subvención o ayuda y demostrar que no tienen otra fuente de ingresos.

Los parlamentarios leoneses les transmitieron el “cariño y apoyo” de todos los leoneses, tomaron nota de todas las propuestas de la Asociación y se comprometieron a presentar varias iniciativas parlamentarias que puedan ayudar a resolver el problema. Además, recordaron que en España residen más de 9.000 venezolanos, muchos de ellos con doble nacionalidad, es decir, españoles también, que se encuentran en una situación de “extrema precariedad” al no percibir ingreso alguno a pesar de tener un derecho reconocido a pensión.