La semipeatonalización de la calle Camino de Santiago ha implicado el cierre de uno de los sentidos de la circulación lo que obliga a los conductores a buscar alternativas para llegar desde la Plaza de Lazúrtegui a las inmediaciones de la propia calle Camino de Santiago y adyacentes. Así, el ya concurrido cruce de la calle Lago de la Baña con la avenida Valdés está registrando una mayor afluencia de vehículos, provocando a ciertas horas atascos, según denuncian los vecinos y conductores.
El principal problema lo tienen los conductores que acceden a la avenida Valdés directamente desde la avenida de Compostilla. Al llegar al cruce con Lago de la Baña deben ceder el paso a los coches que desde esta última calle acceden a Valdés para tomar Goméz Nuñez o seguir recto -por Valdés-. La gran afluencia de vehículos en Lago de la Baña (que llegan desde el cruce del Intercambiador) hace que se forme una cola y que aquellos que esperan en el ceda el paso deban realizar largas esperas, que en ocasiones se saldan con nervios, maniobras arriesgadas y discusiones entre conductores.