Los Bomberos de Ponferrada llevaron a cabo un total de 25 intervenciones desde el viernes por la tarde hasta las 10 de la mañana del domingo debido a las adversas condiciones meteorológicas de un fin de semana marcado por las intensas lluvias y las fuertes rachas de viento registradas, especialmente durante la tarde del sábado, en la que se concentraron gran parte de las actuaciones. Según informaron fuentes del servicio, la gran cantidad de incidentes atendidos obligó a los efectivos a redoblar sus esfuerzos y provocó que el operativo disponible tuviera que duplicarse en varias ocasiones.
En la tarde del sábado, los bomberos atendieron tres inundaciones y llevaron a cabo una decena de intervenciones por caídas o riesgo de caída de objetos, entre los que se incluyeron desprendimientos de cascotes, pancartas, caídas de pizarras de las cubiertas, retirada de antenas e incidentes causados por persianas.
Además, también fue necesaria la intervención del servicio en la retirada de árboles caídos sobre la calzada en ubicaciones como las carreteras de Puebla de Sanabria o de San Cristóbal, así como en zonas de la ciudad como el paseo Los Negrillos, el bulevar Juan Carlos I o la avenida de Fabero.
Por lo que respecta a la jornada del viernes, los bomberos tuvieron que evacuar a una persona de una caseta en el barrio de Flores del Sil y participaron también en el rescate de dos perros y 11 gallinas en el camino bajo de San Andrés, en la zona de huertas del Puente Boeza. Además, intervinieron en un derrumbe, una caída de objetos y una inundación.
El mismo viernes, la Policía ya prohibió la entrada a paseos y zonas inundables por la crecida de los ríos Sil y Boeza y las lluvias obligaron a suspender diversos actos y a modificar el recorrido de una línea de autobús urbano, debido a los cortes de tráfico ocasionados en la principal carretera de acceso al valle del Oza así como en el acceso a la localidad de Toral de Merayo desde el barrio de Flores del Sil.