El presidente del comité de empresa en la factoría LM Windpower de Ponferrada, Gabriel Garnelo, confirmó este miércoles que la intención de la dirección de la planta es despedir a 393 personas trabajadoras de la planta “repartidos entre todas las secciones, turnos y puestos”, según transmitieron a los representantes de los trabajadores en la reunión mantenida este miércoles. Dentro de las medidas sociales que la compañía propone para mitigar los efectos de ese despido destaca la reubicación de 25 de los trabajadores en la planta de Castellón y de otros 240 en la factoría de Cherbourg (Francia).
Durante el encuentro, los directivos de la planta situada en el polígono de La Llanada también comunicaron a los representantes sindicales sus intenciones de aprobar una modificación sustancial de las condiciones de trabajo, que consistirá en un cambio en los calendarios productivos para repartirlos en tres formatos: de lunes a viernes, de martes a sábado y de miércoles a domingo.
Según Garnelo, lo que pretende la empresa con estas medidas es completar el trabajo pendiente con una disminución de la plantilla de casi el 40 por ciento y una reducción de salario en una cuarta parte. “La implantación hace un año del calendario 4-2, el enorme número de horas extraordinarias realizadas y el asfixiante ritmo de trabajo impuesto provocó que la producción prevista para este año esté, a estas alturas, casi completa”, remarcó el presidente del comité, que aseguró que los representantes de los trabajadores siguen defendiendo una postura basada en “cero extinciones de empleo”.
Primeras protestas
Como antesala de las posibles movilizaciones que puedan producirse en las próximas semanas, un grupo de trabajadores de la factoría mostró este martes su descontento con los ajustes anunciados por la empresa colocando una pancarta de protesta en el mirador de Orellán, uno de los enclaves más reconocibles del paraje de Las Médulas. Los empleados califican a los responsables de la empresa de “traidores” y advierten de que “el Bierzo no olvida”.
Preguntado por la situación, el alcalde de Ponferrada, Olegario Ramón, señaló que el Ayuntamiento ya ha iniciado contactos “más allá de la provincia y de la Comunidad” para intentar ayudar en la búsqueda de una solución. “Es un tema que nos preocupa”, reconoció Ramón, que subrayó el “compromiso” del Consistorio con la parte social del conflicto.
Por su parte, el Comité Central de Empresa Europeo (CEE) de General Electric, empresa matriz de LM, mostró ayer su rechazo al ERE y a la modificación sustancial de las condiciones de trabajo en la planta de de Ponferrada y mostró su solidaridad con los trabajadores. En una carta entregada a la dirección de la multinacional, el CEE manifiesta que LM es una empresa líder en la producción de palas para turbinas eólicas, con más de 20 años de trayectoria, clientes en todo el mundo y una buena salud financiera.
En su misiva a la dirección, el CEE solicita “parar cualquier plan de despidos en LM Ponferrada, mantener y apostar por la industria, especialmente en energías renovables, y trabajar con los sindicatos para asegurar la viabilidad de la planta a largo plazo”.
El Comité Central de Empresa Europeo de General Electric (CEE), del cual participa de forma directa por parte de la representación de los trabajadores y trabajadoras de LM, el representante de Comisiones Obreras, Ursicino Sanchez, mostró su rechazo al ERE y a la modificación sustancial de las condiciones de trabajo en la planta de LM Wind Power de Ponferrada y muestra su solidaridad con los trabajadores.
La dirección de LM Wind Power había anunciado el martes 6 de julio despidos en la planta de Ponferrada y cambios en las condiciones de los trabajadores. Así lo comunicó el comité de empresa en un comunicado después de la reunión que mantuvieron con la dirección de LM a las 15.30 horas.
Normal. El alcalde dijo que estaba contra los parques eólicos. Blanco y en botella
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