La empresa LM Windpower, la mayor por número de trabajadores en la comarca del Bierzo, con más de un millar de empleados, paralizó en la mañana de este martes su producción al no poder garantizar la salud y seguridad de los operarios durante la epidemia del coronavirus Covid-19. La compañía y el comité de empresa alcanzaron un acuerdo que permitirá a los trabajadores volver a sus casas y disfrutar de manera adelantada del periodo vacacional de siete días correspondiente a la Semana Santa.
Con esta medida, la representación de los trabajadores busca facilitar a la empresa la presentación de un Expediente de Regulación de Empleo Temporal (ERTE) por causas de fuerza mayor, que empezará a tramitarse mañana y que se aplicaría a la vuelta de la semana de vacaciones. La autoridad laboral será la encargada de analizar el expediente y dictar una resolución, donde se determinará la duración de la medida.
Al respecto, el presidente del comité de empresa, Gabriel Garnelo, del sindicato USO, reconoció que entre los trabajdores existía “preocupación” por la situación, ya que un contagio en la factoría podría llegar a multiplicar exponencialmente los casos en la comarca, debido a la la “amplia plantilla” de la empresa. En ese sentido, Garnelo subrayó que los operarios disponen de equipos de protección individual, pero explicó que “el problema viene en los cambios de turno, con las zonas comunes”, como los vestuarios y comedores o la zona de fichaje.
Cabe recordar que el pasado viernes, la sección sindical de CGT en la empresa advirtió de que en las reuniones que la dirección convocó durante los días anteriores para informar a la plantilla de la situación no se siguieron los protocolos hechos públicos por las autoridades sanitarias. Según CGT, más de 300 trabajadores por turno tuvieron que acudir de forma obligatoria a estos encuentros que tuvieron lugar en una sala “donde no había espacio ni las más mínimas medidas higiénicas”, denunció el sindicato, que recordó que las recomendaciones aconsejan no hacer reuniones en sitios cerrados y mantener una distancia de seguridad mínima de un metro entre personas.
Para el sindicato, esta actuación “irresponsable” de la dirección de la fábrica “deja bien claro que su prioridad es su propio beneficio económico, muy por encima de la salud y la seguridad de las personas que trabajan en la fábrica y de sus familias”. “Esperamos no tener que lamentar esta irresponsabilidad”, concluyeron.
La situación en la factoría
Según el acuerdo alcanzado, la parada en la producción se produjo a primera hora de la mañana de este martes para el personal de producción, calidad, logística y cargas. Por su parte, los operarios de mantenimiento continuarán trabajando hasta las 15 horas. Además, la empresa prevé que se necesitará un equipo de unas cuatro personas del área de logística para descargar los camiones en tránsito y otro de cinco operarios para cargar ocho palas de 62 metros pendientes de incluir en un pedido. Para estos trabajos excepcionales, será el responsable de cada departamento el que comunicará individualmente a los trabajadores que deben permanecer en la planta.