La lluvia no deslució el Gran Magosto de Ponferrada

La continua lluvia caída sobre la capital berciana en la tarde del viernes no deslució la celebración del Gran Magosto de Ponferrada organizado por el Ayuntamiento con la colaboración de la Asociación de Vecinos del Puente Boeza, cuyo presidente, Isidro Álvarez, ejerció como mantenedor.

El concejal de Turismo, Iván Alonso, incluso resaltó las bondades de la lluvia, señalando que “el Bierzo tiene una bendición, que es el agua. El agua es pureza, es crecimiento, es vida. Además, somos bercianos y somos guerreros, el agua no nos echa para atrás”, aseguró, destacando la gran cantidad de personas que se acercaron a disfrutar del magosto.

Alonso anunció que la idea del Ayuntamiento de Ponferrada es convertir esta celebración en un “referente” de los magostos en el Bierzo y “vamos a seguir dándole vueltas para hacerlo más atractivo en la segunda edición para hacer que sea uno de los grandes magostos del Bierzo”.

La fiesta se inició con la preparación de la queimada, que Iván Alonso definió como “el pebetero mágico del Bierzo para purificar y dejar atrás todo lo malo del año”. Junto al mítico brebaje, los chorizos y las castañas asadas fueron los grandes protagonistas del magosto, que contó con la participación del grupo Alegría Berciana para amenizar con su música la noche.