Los ciudadanos de las zonas rurales de León, Salamanca, Burgos y Valladolid cuentan desde este martes con un nuevo servicio que les permitirá renovar su DNI o pasaporte en tan solo diez minutos gracias a los Vehículos Integrales de Documentación (Vidoc) de la Policía Nacional. Estas unidades móviles comenzarán a operar en las cabeceras de comarca de estas provincias, reduciendo considerablemente los tiempos de tramitación y evitando los desplazamientos a las capitales.
El delegado del Gobierno en Castilla y León, Nicanor Sen, explicó durante la presentación en la plaza de San Marcos de León que estas nuevas furgonetas simplifican los trámites para la obtención de los documentos. “Pasamos de tres días a solo diez minutos. Antes, un equipo de policías y funcionarios debía desplazarse durante días para atender estas necesidades, pero ahora todo se reduce a un único paso”, destacó Sen, acompañado por el jefe superior de Policía de Castilla y León, Juan Carlos Hernández Muñoz, y varios comisarios principales de la Comunidad.
Cómo funciona el servicio
Los interesados en renovar o expedir el DNI o pasaporte a través de las unidades móviles deberán inscribirse en un listado gestionado por su Ayuntamiento, desde donde se les citará para el trámite. De esta manera, se evita que los habitantes de pequeñas localidades tengan que trasladarse a las oficinas de las ciudades donde se realizan estos trámites habitualmente.
Además, las personas con movilidad reducida seguirán teniendo las mismas facilidades que hasta ahora y podrán comunicar su situación directamente a la Policía Nacional para que se organice su renovación.
Implantación inmediata en cuatro provincias
Las nuevas unidades móviles comenzarán a funcionar de manera inmediata en León, Salamanca, Burgos y Valladolid. Según Nicanor Sen, el objetivo es que cada comisaría provincial de Castilla y León disponga de un vehículo de este tipo a lo largo del año 2025.
El delegado del Gobierno también recordó que algunas de estas furgonetas se desplazaron recientemente a Valencia para atender las necesidades urgentes derivadas de la DANA que afectó a esa región, lo que retrasó temporalmente su puesta en marcha en Castilla y León.