Las medidas del Ministerio de Justicia llevan a los Jueces a una jornada de huelga

Este miércoles, Jueces y Fiscales de toda España se han sumado a una jornada de huelga para protestar por las medidas adoptadas por el Ministerio de Justicia y las partidas presupuestarias recogidas en los Presupuestos Generales del Estado para el próximo ejercicio. También han secundado la huelga cuatro de los once jueces del Palacio de Justicia de Ponferrada, que han reclamado más personal, ya que la capital del Bierzo cuenta con una media de jueces bastante inferior a la nacional.

Pese a esa escasez, el Juez Decano, Oscar Hernáiz, ha asegurado que el volumen de resolución está siendo de los más altos de toda Castilla y León. “Se está trabajando completamente a destajo y en ese sentido no podemos achacar a una falta de voluntariedad del personal judicial el que la Justicia no vaya a funcionar mejor. Por eso claro que nos preocupa y es lo que estamos reclamando y reivindicando, esa necesaria dotación para poder hacer mejor nuestro trabajo, para poder atender a la gente como realmente merece”, señaló.

Por ello, esperan que el ministro Gallardón rectifique en sus políticas pero no tienen ninguna esperanza de que esto vaya a ser así. “Es una situación de franca impotencia el valorar y el ver que ni siquiera se nos está escuchando y es una situación difícil porque los jueces no queremos estar en la primera plana de esta manera. No estamos pidiendo por nosotros sino por las personas que no tienen quien les pida”, argumentó el Juez Decano.

De este modo, considera que si las reformas no cambian, “lo que vamos a ofrecerles a futuro a los ciudadanos es mucho peor que lo que les ofrecíamos antes, y eso tampoco era bueno”.

A la entrada del Palacio de Justicia de Ponferrada, y en apoyo a las reivindicaciones de los jueces, se encontraban también representantes sindicales de UGT. Jesús Carballo, representante de la Federación de Servicios Públicos, considera que tienen motivos de sobra para esta huelga, ya que al igual que otros sectores están sufriendo recortes, sobrecargas de trabajo o unas condiciones laborales “bastante lamentables ya”.