Las carreteras de León se cobraron 28 vidas en 2024, tres más que el año anterior

Las carreteras de la provincia de León registraron 28 fallecidos en 2024, un incremento de tres víctimas mortales respecto al año anterior, según datos provisionales de la Dirección General de Tráfico (DGT) recogidos por la agencia Ical. Este dato sitúa a León como la provincia con más muertes en accidentes de tráfico en Castilla y León.

En el conjunto de la Comunidad, las vías interurbanas se cobraron la vida de 125 personas, siete más que en 2023, lo que supone un incremento del seis por ciento. Tras León, Zamora y Burgos se colocan entre las provincias con más fallecidos, con 20 y 17 víctimas mortales, respectivamente.

Entre los accidentes más graves ocurridos en León, destaca el siniestro del pasado 16 de septiembre en la N-6, a la altura de Carracedelo, donde tres trabajadores de la empresa coruñesa Pinturas Gis de Carballo perdieron la vida tras la colisión entre una furgoneta y un camión. Los fallecidos viajaban en un vehículo tipo pick-up junto a dos compañeros que resultaron heridos.

El año no ha comenzado bien en la provincia, ya que este miércoles, 1 de enero, se registraba el primer accidente mortal de 2025 cuando un camionero perdió la vida tras salirse de la vía en la carretera CL-631 a la altura del municipio berciano de Toreno.

Plan de choque contra la siniestralidad

El preocupante incremento de accidentes mortales llevó a la DGT a poner en marcha un plan de choque en mayo, que incluyó la instalación de ocho radares (dos fijos y seis de tramo), el aumento de los controles de velocidad, alcohol y drogas, y el uso de motos camufladas. Además, se reforzó la plantilla de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil y se lanzaron campañas de concienciación.

El delegado del Gobierno en Castilla y León, Nicanor Sen, calificó entonces de “inasumible” el repunte de la siniestralidad, señalando como principales causas la velocidad inadecuada y el consumo de alcohol y drogas.

Contexto regional

En otras provincias, la situación fue dispar. Ávila y Palencia experimentaron incrementos significativos en el número de fallecidos, mientras que en Segovia y Soria se registraron notables descensos. Burgos, Salamanca y Valladolid mantuvieron cifras más estables.

El año 2024 cerró con cifras por debajo de las de 2022, cuando se alcanzaron los peores datos de siniestralidad vial de los últimos años, con 136 fallecidos en la Comunidad.