La desaceleración económica que sufrirá la economía de Castilla y León este año pronosticada por los principales institutos de predicción empieza a revelarse en los bolsillos de los castellanos y leoneses. Los datos de medio año de recaudación tributaria revelan que a pesar de crecer los ingresos del trabajo con la mejora del empleo, este alza no compensa el descenso del consumo, lo que denota una alta precarización de los contratos, por la temporalidad y las bajas remuneraciones, junto a una pérdida de confianza del consumidor.
La Agencia Tributaria recaudó en Castilla y León durante los seis primeros meses del año 1.467,95 millones de euros, lo que supone un importante descenso del 7,4 por ciento respecto al dato de hace un año por las mismas fechas. Las partidas más importantes procedieron del IRPF y del IVA, aunque con comportamientos opuestos, ya que las rentas del trabajo crecieron un 3,4 por ciento en los meses de estudio, mientras que el impuesto indirecto que grava el consumo, sufrió un retroceso del 12,4 por ciento respecto al dato de 2019, con unos ingresos para el Estado de 619,47 millones de euros.
El informe elaborado por Ical, con datos de la Agencia Tributaria, refleja asimismo un mal comportamiento de la actividad empresarial, con un Impuesto der Sociedades, que permitió una recaudación en la Comunidad, de 94,76 millones de euros, que representan una contracción del 22,7 por ciento, en comparación a 2018.
Otro dato negativo recogido en los datos de recaudación por delegaciones que proporciona el Ministerio de Hacienda, se encuentra en los Impuestos Especiales, que también gravan el consumo de forma indirecta, y que se desplomaron un 56,6 por ciento respecto al periodo de enero a junio de 2018, hasta apenas 11,71 millones de ingresos por estos conceptos.
El departamento que dirige María Jesús Montero también precisa en sus datos que la recaudación del Impuestos de la Renta de los no Residentes (IRNR) alcanzó en la Comunidad en el periodo de estudio los 7,62 millones de euros, con un aumento del 47,5 por ciento. Asimismo, el Impuesto sobre Tráfico Exterior permitió a Estado ingresar en Castilla y León, 10,39 millones de euros, con un buen comportamiento, ya que esa cantidad supuso un crecimiento en relación al dato de 2018, del 77,7 por ciento.
Por último, las cifras de la Agencia Tributaria para el Capítulo III, que incluye la tasa radioeléctrica, el recargo de apremio, los intereses de demora y las sanciones tributarias, revelan una recaudación por estos conceptos de algo más de 24 millones de euros, con un ligero aumento del 4,7 por ciento.
Provincias
Un análisis provincial revela que la recaudación global del Estado sólo se elevó en los meses de análisis en Valladolid (467,27 millones de euros) y Palencia (120,43 millones), un 4,8 y cuatro por ciento, respectivamente.
Por el contrario, bajó en Burgos (297,25 millones de euros), un 21,4 por ciento; en Zamora (45,31 millones), un 21,1 por ciento; en Segovia (79,39), un 14,3 por ciento; en León (182,88), un 10,9 por ciento; en Ávila (39,78), un siete por ciento; en Soria (66,05), un 5,7 por ciento; y en Salamanca (169,55), un 3,8 por ciento.
Por lo que se refiere al IRPF, la recaudación subió en Palencia (56,46 millones de euros), un 47 por ciento; en Segovia (33,78 millones), un 5,3 por ciento; en Valladolid (289,18), un 3,4 por ciento; en León (70,64), un dos por ciento; y en Burgos (114,12), un 1,8 por ciento. En el extremo opuesto, descendió en Ávila (11,43 millones de euros), un 13,3 por ciento; en Salamanca (71,4 millones), un 9,2 por ciento; en Zamora (21,8), un 3,6 por ciento; y en Soria (23,74), un 1,7 por ciento.
Por último, en un análisis del IVA por provincias, los ingresos por consumo retrocedieron en todas las delegaciones, en Zamora (17,99 millones de euros), un 27,7 por ciento; en Palencia (44,89 millones), un 22,3 por ciento; en Segovia (33,05), un 20,7 por ciento; Burgos (175,8), un 19,7 por ciento; eón (97,07), un nueve por ciento; Ávila (23,97), un 5,2 por ciento; Soria (36,1), un 4,6 por ciento; Valladolid (117,34), un dos por ciento; y Salamanca (73,23), un 1,7 por ciento.