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ICAL Los castellanos y leoneses tendrán en sus bolsillos 150 millones de euros más en 2015 por la rebaja fiscal que la Junta de Castilla y León aplicará en 2015 sobre el tramo autonómico y el incremento de los mínimos personal y familiar del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF). La medida no tendrá “coste” para las arcas de la Comunidad, según los cálculos del Ejecutivo, porque sostiene que reactivará el consumo y favorecerá la recuperación y la creación de empleo, lo que se traducirá en un incremento de la recaudación fiscal, que no reducirá la financiación de la autonomía.
Este cambio en el impuesto sobre la renta se sumará el próximo año a la reducción en dos tercios de la tarifa autonómica del Impuesto sobre Hidrocarburos, conocido como ‘céntimo sanitario’, que pasará de 4,8 céntimos por litro a 1,6, lo que debería traducirse, según la previsión del Gobierno autonómico, en una rebaja de los precios del combustible en la Comunidad, que registra uno de los más altos, y en un repunte del consumo. Además, se mantendrán el próximo año los 50 beneficios fiscales, con cambios en algunos para favorecer la creación de empleo.
Estos son los principales cambios en materia fiscal que la Junta aplicará el próximo año y que recoge el anteproyecto de Ley de Medidas Tributarias y de Financiación de las Entidades Locales, que examinó hoy el Consejo de Gobierno. La consejera de Hacienda, Pilar del Olmo, explicó el detalle de estas reformas fiscales, que se unirán a las dictadas por el Gobierno central para 2015 y 2016, para “apuntalar” la recuperación y contribuir a la creación de más empleo, manteniendo la “calidad” de los servicios públicos.
“Era el momento de tomar estas decisiones”. “El más conveniente”, apostilló la responsable de las finanzas de Castilla y León, quien insistió en que son medidas, “muy meditadas”, tomadas con “responsabilidad” y no electoralistas. Pilar del Olmo argumentó que los cambios en el IRPF y el ‘céntimo’, que adelantó este martes el presidente de la Junta, Juan Vicente Herrera, en un encuentro con empresarios, se adoptan porque están “mejorando los ingresos tributarios” en la Comunidad y el Estado, así como bajando los tipos de interés. “Va a mejorar el poder adquisitivo de los ciudadanos”, agregó.
La fórmula de la Junta para bajar impuestos, mantener los servicios y no realizar recortes se sustenta en el “círculo virtuoso” de que si los ciudadanos manejan más dinero podrán consumir más y contribuirán a la recuperación, lo que llevará aparejado un aumento de la recaudación y, por tanto, de la financiación de la Comunidad, que compensaría la pérdida de 150 millones. Además, Del Olmo indicó que las entregas a cuenta para 2015 ya han sido comunicadas y son “fijas”, por lo que no afectará al presupuesto, y recordó que los contribuyentes harán la declaración en 2016, por lo que hasta 2017 no se producirá la liquidación final, que rechazó sea negativa, salvo que se mantuviera la crisis.
Renta disponible
La consejera de Hacienda informó de que el IRPF será en la Comunidad un impuesto “más progresivo”, al tiempo, que “todos los ciudadanos -contribuyentes- pagarán menos”. Los cambios se centran en dos vías. Por un lado, el Ejecutivo de Herrera acompañará los cambios impulsados por el Gobierno central con una rebaja en el tramo autonómico, que se notará en las nóminas a partir del 1 de enero de 2015. El objetivo es que haya “más renta disponible”. Ademas, Pilar del Olmo remarcó que la bajada es mayor si se tiene en cuenta que la Junta no ha incrementado este tributo, a diferencia de otras comunidades y del Ejecutivo de Mariano Rajoy.
Sobre la tarifa autonómica, Del Olmo detalló que se “desdobla” el primer tramo, que hasta ahora englobaba las rentas hasta 17.707,2 euros, existiendo uno hasta 12.450 euros, lo que hace un total de cinco. En el primero, la tributación pasa del 12 por ciento al diez, tramo en el que se encuentran el 50 por ciento de los contribuyentes de Castilla y León (1.257.025), lo que supondrá para ellos un ahorro del 16,7 por ciento. Aunque el resto se mantienen, todos se beneficiarán del cambio, de forma que los primeros 12.450 euros de cualquier base liquidable pagará también un diez por ciento, frente al 12 actual. Así para los que declaren 53.407, el ahorro será del tres por ciento.
Con este cambio, la Comunidad se sitúa, según Del Olmo, entre las autonomías con el tipo más bajo de España. Además, en paralelo, la Junta ha incrementado de media un 32 por ciento los mínimos personal y familiar, para adaptarse a la regulación estatal, que permitirá a los contribuyentes que declaren menos de 12.000 euros, no tener que realizar la Declaración de la Renta. Esta medida beneficiará a unos 100.000 castellanos y leoneses, según confirmó Del Olmo.
Céntimo sanitario
La titular de Hacienda prevé devolver el “gran esfuerzo” pedido a ciudadanos y empresas desde 2012 con la rebaja de la tarifa autonómica del ‘céntimo sanitario’, que descenderá dos tercios, situándose el tipo mínimo, incluso por debajo de la Comunidad de Madrid. Del Olmo expuso que se aprobó para no tener que aplicar recortes. “No nació para quedarse”, si bien reconoció que en el primer año aportó 86 millones. “Ahora las circunstancias han cambiado”, dijo, como a su juicio lo demuestra la evolución del déficit público.
Del Olmo señaló que la rebaja tendría que “traducirse” en una caída del precio de venta al público del combustible, lo que ayudará a que se recupere el consumo y, por lo tanto, la recaudación del Impuesto de Hidrocarburos, del que se nutre la financiación autonómica. La consejera adelantó que en 2015 repuntará, porque hasta mayo ya lo ha hecho, y comunicó que las entregas a cuenta, que les ha trasladado el Gobierno, recogen un incremento.
Beneficios y tasas congeladas
La rebaja fiscal se aplicará manteniendo los 50 beneficios fiscales autonómico, que responden a prioridades como el apoyo a las familias con hijos o la generación y el mantenimiento del empleo. Para ello, el anteproyecto amplía uno de los que se introdujeron en 2014. Se trata del tipo reducido en el Impuesto sobre Transmisiones Patrimoniales Onerosas que se aplica a la compra de inmuebles para sede o centro de trabajo de una empresa o negocio profesional, que desciende del cinco al cuatro por ciento. El porcentaje general es del ocho por ciento, si bien sube al diez si se trata de un edificio de más de 250.000 euros.
En materia de juego se introduce la tributación del nuevo tipo de máquinas E1, ante la posibilidad de que comiencen a instalarse en 2015. Asimismo, se modifica la cuota de las máquinas B conectadas bajo servidor, que pasa al diez por ciento de la base más 1.000 euros. A esto se une la aplicación de un tipo reducido del 15 por ciento en el bingo electrónico ligado a la creación de empleo.
Respecto a las tasas, la Junta no las actualizará al IPC (Índice de Precios al Consumo), aunque se crean dos nuevos y se modifican nueve. En concreto, nacen las de inscripción o acreditación en el Registro de Centros y Entidades de Formación Profesional para el Empleo de Castilla y León, así como por autorización, seguimiento, control y evaluación de la impartición de acciones formativas conducentes a la obtención de certificados de profesionalidad no financiadas con fondos públicos de la Administración laboral. Además, se reforma para establecer una nueva de ámbito interautonómico en materia de caza y pesca.
Finalmente, la Junta introducirá elementos de simplificación administrativa en la Ley del Ruido, elimina el derecho de preferencia en la prestación de servicios de transporte escolar por parte de las operadoras de servicios regulares, se crea el área de transporte metropolitano y se anula la prohibición de que se celebren actuaciones musicales en algunos tipos de bares, a petición de ayuntamientos.