E.Jiménez/EBD Los tambores y clarines en la madrugada de este Viernes Santo han servido de llamada para que los cofrades de la Hermandad de Jesús Nazareno acudieran a la Iglesia de San Andrés para celebrar la procesión del Encuentro.
“Es Viernes Santo de dolor y los hermanos cofrades se desperezan para marchar anónimamente haciendo penitencia por las calles de Ponferrada en una sola hilera y siguiendo al Mayordomo de uno en uno. El silencio se quiebra con el ronco percutir de los timbales y la llamada obstinada de los clarines hasta la Plaza de la Encina”. Con estas palabras anunciaba Monseñor Lucio Ángel Vallejo la procesión del Encuentro, que partía a las 9 de la mañana.
Los pasos de la Oración en el Huerto, el Ecce Homo, la Flagelación y el Jesús Nazareno recorrieron la Avenida del Castillo, la glorieta del Cruceiro, la Calle Obispo Osmundo, la Calle Ancha, la Plaza del Ayuntamiento y la Calle del Reloj hasta llegar a la Plaza de la Encina.
“Hasta allí ha llegado otra pequeña procesión con San Juanín y la Virgen de la Soledad, llena de luto y amargura. San Juanín el joven, prototipo del mensajero que anuncia y señala dónde está el Señor, corre por encima de las cabezas de la muchedumbre que llena la plaza para señalárselo a María y posibilitar el encuentro”, señalaba Lucio Ángel Vallejo en su pregón de la Semana Santa ponferradina.
Decenas de fieles y turistas no han querido perderse la carrera de San Juanín en la Plaza de la Encina, donde el Reverendo Eduardo del Valle, administrador del Seminario Menor Diocesano, ha dado lectura al sermón.
no me gusta nada lo que han hecho con los pasos de Ponferrada dorarlos como si estuvieramos en Andalucia, la virgen de la Soledad no se parece en nada a nuestra Soledad, ¿quién consintió es barbarie de restauración?, cuando alguien hace eso debe saber lo que hace, y las andas y eso que parece calamina, las andas dejen las que estaban, parece todo de pandereta…