La plataforma en Defensa de la Sanidad Pública del Bierzo y Laciana acordó remitir al gerente regional de salud, Rafael López, una lista de exigencias “urgentes” que permitan frenar el deterioro que, a su juicio, está sufriendo la sanidad pública, algo que se materializará la próxima semana por parte del colectivo y que se trasladará a la Junta en una posible reunión con el Ejecutivo autonómico “en el supuesto de que decidamos acudir a ella”. Así lo trasladaron los miembros de la plataforma después de la reunión mantenida hoy con López quien consideraron que quiso “restringir” los temas del encuentro a la lista de compromisos remitida por la Gerencia las la reunión mantenida en abril en Valladolid.
El colectivo recordó que su lista de reivindicaciones trasladada previamente “no coincidía ya en ese momento con sus compromisos” y lamentaron que el gerente no quisiera hablar “de nada que tuviera referencia a una fecha anterior a abril de 2017” como si “antes de esa fecha no fuese el PP el que gobernara en esta Comunidad”. Sin embargo, en la reunión mantenida hoy, denunciaron que “no ha cumplido ni siquiera aquellos compromisos de abril”
En este encuentro, desde la plataforma se insistió en que las agendas de los especialistas y de las pruebas diagnósticas “están cerradas” hasta enero, de manera que entienden que las listas de espera “están falseadas”, al tiempo que denunciaron en que los volantes de asistencia a los especialistas se están “amontonando” en los cajones de los médicos de Atención Primaria “hasta que las cifras de lista de espera no sean tan escandalosas”.
Igualmente, declararon que los consultorios rurales acumulan desde junio más de 715 días sin atención médica o de enfermería, lo que significan más de 2.000 horas “sin la atención que estaba planificada por el mismo Sacyl”, mientras que las plantillas de profesionales “no se han movido” y siguen sin aumentar las contrataciones de personal para sustituciones o para cubrir vacaciones.
Por otro lado, también se aseguró que los dos nuevos quirófanos “no tienen nuevos profesionales contratados” y se atienden “con el mismo personal que había antes”, además de que las listas de espera han disminuido en menos de 60 personas, lo que supone “una cantidad irrisoria”, y el resto se debe a externalizaciones que se entiende que “no es un sistema aceptable de gestión de la sanidad pública”.