La tarde fue un ‘sin vivir’ para la Hermandad del Cristo de la Redención y Nuestra Señora del Carmen, que hasta última hora no pudo saber si su tradicional procesión, la del barrio de La Placa, podría salir o no. Finalmente la lluvia dio una tregua y la procesión se pudo celebrar, con el mismo fervor y al tiempo espectacularidad que le caracteriza, máxime con la presencia este año del Obispo de la Diócesis de Astorga, Juan Antonio Menéndez.