La Junta invertirá alrededor de 25 millones de euros en la restauracion del cielo abierto Nueva Julia, ubicado en el municipio leonés de Cabrillanes; actuación requerida por una sentencia de 2011 del Tribunal de Justicia Europeo, que reclamó a la autoridades competentes que se hiciera de forma inmediata. La condena incidía en que se había autorizado su apertura sin tener en cuenta las consecuencias para el hábitat de recuperación del urogallo y del oso pardo.
La explotación, liquidada tras un proceso concursal, era propiedad de Coto Minero Cantábrico (CMC) -sucesora de la Minero Siderúrgica de Ponferrada, MSP, del grupo empresarial de Victorino Alonso, para el que la Fiscalía reclama la apertura de juicio oral y ocho años de prisión por un presunto delito continuado contra los recursos naturales y el medio ambiente.
La consejera de Economía y Hacienda, Pilar del Olmo, que hoy presidió en La Pola de Gordón (León) la reunión del Comité de Seguimiento del Plan de Dinamización Económica de los Municipios Mineros, fue la encargada de anunciar esta intervención millonaria en una mina a cielo abierto ubicada en el Espacio Natural Alto Sil, dentro de una Reserva de la Biosfera y sobre la que hay diversas figuras de protección, además de albergar especies en peligro de extinción como el oso oardo o el urogallo.
Filón Verde, el colectivo conservacionista que promueve la intervención contra el que fuera propietario de Nuev a Julia también critica que la administración no fuese más vigilante respecto a la actividad extractiva desarrollada en ese entorno de gran valor medioambiental.
“Es una fuerte apuesta por esta zona. Es muy costosa y esperamos recuperar parte de ese dinero, tanto por la vía empresarial como de los Fondos Miner”, señaló Del Olmo antes de matizar que, de momento, “la apuesta de la Junta es clara y vamos a contratar esa restauración que va a suponer empleo que va a durar unos años; evidentemente luego desaparece pero es empleo de calidad”.