La antigua herrería de Tejedo de Ancares, ubicada en un paraje de gran interés natural y cultural, ha sido recuperada de la ruina gracias a los trabajos de restauración y consolidación llevados a cabo con fondos del Instituto Leonés de Cultura de la Diputación de León y del Ayuntamiento de Candín. El diputado de Cultura, Arte y Patrimonio, Pablo López Presa, acudió a visitar las obras junto al alcalde del municipio ancarés, José Antonio Álvarez Cachón; la diputada de zona, Susana Folla Abad, y el coordinador de Proyectos y Actividades del ILC, Emilio Gancedo.
La herrería, de titularidad privada y que se cedió al Ayuntamiento de Candín para su recuperación y revalorización, estaba relacionada con la mina de hierro del valle de Ancares, de la cual se abastecía. Una mina de origen medieval, ya que en el año 1172 el obispo de Astorga don Fernando concede a sus canónigos los diezmos del hierro de Ancares. Eso sí, los permisos para la construcción del edificio que ha llegado a nuestros días datan del siglo XVIII, en concreto de 1788. La explotación constaba de un canal superior o bancillo desde donde la fuerza hidráulica accionaba las ruedas que movían los fuelles y el mazo, en un sistema parecido al de la herrería de Compludo. Próxima a estas estancias se alzaba una carbonera para alimentar el fuego de la fragua, y cerca existían varias bocaminas desde donde se transportaba el mineral en carros de bueyes.
El edificio estaba en ruinas y, aunque solo se mantenían en pie los muros perimetrales, el bancillo y los restos de muros interiores, la restauración permite ahora comprobar la singularidad y las dimensiones de esta herrería. Las obras, en concreto, han consistido en desbrozar y limpiar el exterior y el interior, consolidar y rejuntar los muros, pavimentar los suelos con hormigones y piedra natural y, finalmente, en colocar paneles explicativos en torno a la actividad propia de la herrería: las minas y las rutas de llegada del mineral, la industria de la siderurgia en la comarca, el funcionamiento de las fraguas… Por último, se ha mejorado el acceso peatonal desde la carretera y se ha reabierto el canal de abastecimiento de agua. El presupuesto de adjudicación ha sido de 92.104 euros, de los cuales el Instituto Leonés de Cultura ha aportado 88.656 euros.
En el futuro, el Ayuntamiento de Candín pretende revalorizar este edificio mostrando al público, de un modo didáctico, su funcionamiento e importancia para la economía local.