La Ponferradina continúa intensificando el trabajo de cara a la vuelta a la competición liguera, que sigue sin fecha definitiva a pesar de que el Presidente del Gobierno anunció la semana pasada que se podrá reiniciar a partir del 8 de junio. El calor sigue acompañando a los de Bolo, que entrenan divididos en dos grupos siguiendo las instrucciones del protocolo de seguridad del CSD y LaLiga.
Tras el entrenamiento de este miércoles, el portero Manu García puso el acento en la necesidad de “estar enchufados tanto física como mentalmente” para jugar “una liga de once partidos en muy poco tiempo”. El sevillano señaló que “jugando cada siete días te da tiempo a ‘limpiar’ después de cada partido, pero ahora hay que recuperar mucho más rápido, porque se jugarán partidos cada tres días y no habrá tiempo ni para celebrar ni para lamentarse”.
Manu tiene claro que, a falta de diez puntos para alcanzar la salvación teórica, “el primer objetivo es la permanencia. Si la logramos rápido, Dios dirá, que nadie dude de que iremos a por más. Uno tiene que ser exigente y soñar, pero si no tenemos lo de abajo no podremos construir la parte de arriba”.