La alcaldesa de Ponferrada, Gloria Fernández Merayo, sostiene que nunca ha cedido a las presiones de empresarios, y ha defendido que viene realizando una gestión “transparente”. Tras puntualizar que el Ayuntamiento no está investigado ni implicado en la Operación Enredadera y que siempre ha actuado “con honradez” y “respetando la legalidad”, ha explicado, con la relación a las escuchas telefónicas policiales a José Luis Ulibarri que revelan conversaciones y reuniones con ella, que como alcaldesa tiene la obligación de reunirse con los empresarios que se lo pidan.
Además, recuerda que bajo su mandato no se ha adjudicado ningún contrato con las empresas de Ulibarri.
Sobre la solicitud por parte de varios grupos de la oposición de un pleno extraordinario sobre el papel de Ponferrada en la Operación Enredadera, la alcaldesa sostiene que se trata de una “cortina de humo” con la que dichos grupos, especialmente Ciudadanos está tratando de desviar la atención sobre su “lamentable” actuación en el pleno de los presupuestos.