La Junta de Castilla y León garantizó a los técnicos en cuidados auxiliares de enfermería (TCAE) que conservarán sus condiciones laborales a pesar del cambio de categoría profesional contra el que se movilizaron este jueves a las puertas de sus centros de trabajo en Castilla y León. Recordó que se trata de una cuestión recogida en la normativa nacional y que además se ha incorporado en los acuerdos con las organizaciones sindicales.
Así lo aseguró en la comparecencia posterior al Consejo de Gobierno el portavoz de la Junta y consejero de Economía y Hacienda, Carlos Fernández Carriedo, quien aprovechó para destacar que el Ejecutivo autonómico tiene la “máxima” consideración por estos trabajos, que subrayó realizan un servicio “estupendo”.
En ese sentido, Fernández Carriedo aprovechó para aclarar en tono irónico a la vicepresidenta tercera del Gobierno y ministra de Transición Ecológica y Reto Demográfico, Teresa Ribera, que la Junta no va a cerrar ni las residencias, ni los hospitales para su “tranquilidad”. Esta referencia llega después de que ayer manifestara en el Congreso de los Diputados en una respuesta a Foro Asturias que en la Comunidad se habían cerrado consultorios y colegios.
Los técnicos en cuidados auxiliares de enfermería (TCAE) protagonizaron este jueves una campaña de movilizaciones para defender su titulación con concentraciones a las puertas de las residencias públicas de mayores y de los hospitales de Sacyl de toda la Comunidad. Las protestas responden a la intención de incluir al colectivo en la nueva categoría Tade. Tras recoger casi 4.000 firmas en contra de su inclusión en esta nueva categoría, los profesionales sanitarios continuarán concentrándose cada jueves a las puertas de sus centros de trabajo, a la espera de convocar una manifestación durante el mes de mayo.
Sindicatos, vende trabajadores…