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La Herrería de Compludo abrirá al público el próximo 2 de marzo en horario de invierno, de 11 a 13:30 horas por las mañanas y de 15:30 a 18 de miércoles a domingo. La entrada, para los adultos, son cuatro euros.
Esta herrería, uno de los principales atractivos turísticos del municipio de Ponferrada, se pone en funcionamiento y los grupos de visitantes pueden ver en primera persona cómo el mecanismo hidráulico sigue haciendo retumbar las paredes al mover el martillo pilón mientras suena el crepitar del fuego, con su tradicional fuelle, y se ilumina la sala como ocurriera durante siglos en este emplazamiento.
El timbre del hierro al ser golpeado completa el espectáculo de sonidos e imágenes que hacen de esta una visita inolvidable, cultural y educativa. Para que todo esté a punto, Manuel, el herrero, realiza los pertinentes trabajos de mantenimiento, de manera artesanal, como se hizo siempre. Debido al desgaste, le ha cambiado varias piezas, como pueden ser dos aspas, una cruz y dos levas (estas últimas, lo que levanta el martillo).
Se trata, explica, de ajustes y reparaciones que se hacen todos los años, un trabajo artesanal “de toda la vida”, gracias a los cuales puede seguirse disfrutando al máximo de la visita a esta antiquísima industria.
La Herrería de Compludo
La Herrería de Compludo se encuentra, por poco, en el municipio de Ponferrada, pero para llegar hay que atravesar el de Molinaseca, por la LE-142 para, más o menos en el kilómetro 40, a la altura del Acebo, desviarse (si se viene de Ponferrada) a la derecha. La herrería está un kilómetro antes del pueblo de Compludo y hasta ella hay que llegar por una senda, andando desde el lugar en que se tiene que dejar el coche. Por esto último, es recomendable ir medianamente bien calzado.
La visita a la misma se hace en compañía del herrero, Manuel, quien explica la historia y el funcionamiento de esta fragua alimentada por el Meruelo. Se trata de uno de los atractivos turísticos más impresionantes de la comarca del Bierzo, pues la oportunidad de verla en funcionamiento genera un enorme asombro en grandes y pequeños.