La Plaza Mayor de Astorga vivió ayer su propia Nochevieja adelantada. Más de 2.000 personas no quisieron perderse las campanadas de los maragatos que podrán disfrutar en toda la provincia el día 31 a través de La 8 León. A las 11 comenzaba a llenarse la plaza de jóvenes, y no tan jóvenes, que recogían su cotillón y sus uvas bañadas en chocolate con las que recibir, por adelantado, al nuevo año. La intención es que esta celebración se convierta en una tradición anual.