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La delegada del Gobierno en Castilla y León, Virginia Barcones, pidió “prudencia” ante el inicio de la Semana Santa, durante la cual se esperan cerca de 1,8 millones de desplazamientos por las carreteras de la comunidad autónoma. “Este periodo vacacional es uno de los más complicados del año, al aumentar el volumen de desplazamientos que se realizan en un corto espacio de tiempo, con orígenes y destinos similares y realizados en los mismos días y horas”, señaló.
La delegada presentó la Operación Especial de Tráfico de Semana Santa, con el dispositivo que la DGT pondrá en marcha el viernes 31 de marzo a las 15.00 horas, con una estimación de 1,76 millones de desplazamientos por las carreteras de Castilla y León. La operación se desarrollará en dos fases, coincidentes con el mayor número de desplazamientos y en los que se concentran casi el 90 por ciento de los movimientos previstos. La primera fase empezará el viernes a las 15.00 horas y terminará a las 0.00 horas del domingo, 2 de abril, con una previsión de 423.000 movimientos por carretera. La segunda fase empezará el miércoles, 5 de abril, y terminará el lunes, día 10, con una estimación de casi 1,13 millones de desplazamientos.
Las previsiones de circulación elaboradas por Tráfico contemplan que, desde las 15.00 hasta las 22.00 horas y, especialmente, de 18.00 a 21.00 horas de la primera jornada, podrán registrarse problemas de circulación y retenciones a las salidas de las grandes ciudades, así como en los accesos a zonas turísticas de costa.
El sábado por la mañana continuará el tráfico intenso de salida de los grandes núcleos urbanos, entre las 9.00 y las 14.00 horas, al que se añadirá a la circulación de vehículos cuyo destino sea las zonas de recreo y esparcimiento cercanas a ellas. El domingo se cerrará esta primera fase de la operación especial con el retorno de los que disfrutaron del fin de semana por lo que, previsiblemente, se producirán retenciones entre las 18.00 y las 22.00 horas en los accesos a las ciudades, aunque de menor intensidad que otros domingos.
“Para garantizar la seguridad vial de todos aquellos que se desplacen y facilitar la movilidad y la fluidez en las carreteras, la DGT cuenta durante estos días con la máxima disponibilidad de los medios técnicos y humanos”, indicó Barcones, en referencia a radares fijos y móviles de control de velocidad, helicópteros y drones, además de cámaras y furgonetas camufladas para el control del uso del móvil y del cinturón de seguridad y a agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil, personal funcionario de los Centros de Gestión de Tráfico, patrullas de helicópteros y personal encargado del mantenimiento de equipos y de la instalación de medidas en carretera.
Durante esos tres días, se pondrán en marcha medidas de ordenación y regulación del tráfico, como la instalación de carriles reversibles que faciliten la circulación de entrada o de salida de los núcleos urbanos en función de las necesidades, la paralización de obras y las restricciones a determinados vehículos de mercancías en tramos y horas concretas.