La Fundación Biodiversidad ha resuelto este viernes tres convocatorias de ayudas correspondientes a 2021 para apoyar “proyectos ambiciosos, escalables y con resultados perdurables en el tiempo, que promuevan la transición ecológica”. Uno de los seleccionados es el orientado por el Ayuntamiento de Ponferrada, que recibirá 2,2 millones. Las primeras intervenciones arrancarán en verano, aunque el proyecto tiene una duración de tres años
Las actuaciones abarcarán dos hectáreas en el parque de La Rosaleda, dos más en el parque del Plantío y 24 en el parque del Temple y el área de huertos comunitarios. En todos estos enclaves se llevará a cabo la plantación de especies autóctonas y la colocación de cajas nido para aves y murciélagos. En la antigua montaña de carbón, los trabajos mejorarán la calidad del suelo en un terreno de 32 hectáreas, en el que se adecuarán las praderas, se eliminarán las especies vegetales invasivas y se creará una charca de agua. En el antiguo vertedero de Campo, los trabajos se concentrarán en un área de siete hectáreas en las que se plantarán diferentes especies de árboles y arbustos.
En cuanto a las actuaciones en las rutas de senderismo, la denominada Ruta de los Castillos unirá las fortalezas de Ponferrada y Cornatel, en Priaranza del Bierzo. En la Senda de los Romeros, que transita hacia el embalse de Bárcena, se actuará a lo largo de cinco kilómetros de recorrido, mientras que en la Ruta de los Compludos las actuaciones se extenderán por 22 kilómetros. En todas ellas, se mejorará el firme, se instalarán carteles informativos y se aplicarán tratamientos selvícolas.
El proyecto también contempla la mejora de la ribera de los ríos Sil y Boeza a su paso por el municipio. En el primero de ellos, se actuará en un tramo de 4,2 kilómetros, entre el puente del Centenario y el embalse de Bárcena, mientras que en el segundo las actuaciones abracarán un tramo de 9,1 kilómetros entre puente Boeza y el embalse de Montearenas. En el tramo de casi dos kilómetros en que ambos ríos confluyen, desde puente Boeza hasta el parque del Temple, también se llevarán a cabo estas acciones, que consistirán en desbroces selectivos y monitorización de fauna con el objetivo de recuperar los ecosistemas de ribera. Por último, se diseñarán varias rutas de conexión entre los diferentes espacios verdes de la ciudad, con la creación de cinco nuevos kilómetros de carril bici y el acondicionamientos de tres kilómetros de sendas ciclables ya existentes.