EBD El alcalde de Ponferrada, Samuel Folgueral, responde a la denuncia de IU calificando como “una mentira de poco recorrido” el que su estudio de arquitectura trabajase en el proyecto de AKI. Asimismo, defiende la legalidad urbanística del proceso.
El alcalde reconoció que le produce “tristeza” “la falta de rumbo y la confusión existente en la formación”. “Para empezar no se trata de una recalifiación del terreno, sino que la urbanización de este espacio tenía aparejado uso residencial y comercial y lo que hemos hecho es separar la obligatoriedad de que ambos usos se desarrollaran paralelamente“, explicó Folgueral. “En Ponferrada no hay una demanda de viviendas pero sí una necesidad acuciante de empleo y estamos hablando de 30 puestos de trabajo, viales y aparcamiento para uso público donde antes había un terreno desierto e inutilizado”, remarcó.
Además, quiso “dejar claro”, “una vez más” que todos los proyectos del Ayuntamiento cuentan con el auspicio de los documentos elaborados por los servicios técnicos municipales que “dan viabilidad a estos asuntos”.