En diciembre de 2016 finalizaba el proyecto LIFE12 NAT/ES/000192 “Desfragmentación de hábitats para el oso pardo en la Cordillera Cantábrica”, del ha sido beneficiario coordinador la Fundación Oso Pardo (FOP) y que ha contado con un presupuesto de 1.240.000 euros. La Unión Europea ha aportado el 75% de los fondos y el 25% restante ha corrido a cargo de la FOP, con el apoyo económico de la Fundación Biodiversidad (Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente), la Junta de Castilla y León y la empresa Gas Natural Fenosa.
San Emiliano-Hoces de Vegacervera-Montaña Central
Este proyecto se inició en 2013 en la vertiente sur del corredor interpoblacional del oso pardo cantábrico, en la provincia de León, y dentro de los espacios de la Red Natura 2000 Valle de San Emiliano, Hoces de Vegacervera y Montaña Central de León, con el objetivo de asegurar la viabilidad a largo plazo de la población cantábrica de oso, favoreciendo la conexión entre las dos subpoblaciones cantábricas (la occidental: Asturias, Laciana y Alto Sil, principalmente, y la oriental) y la aceptación social del oso en el corredor de comunicación. Durante este tiempo se han llevado a cabo acciones directas de conservación dirigidas a mejorar la conectividad territorial y acciones de sensibilización e información de la población local y los actores sociales del territorio.
Entre las primeras, destaca la creación de una red de 234 bosquetes de conectividad, enriquecimiento trófico y canalización, distribuidos por las zonas de mayor importancia para la dispersión de los osos o con mayor necesidad de mejora de la calidad del hábitat, que están formados por más de 95.000 árboles y arbustos autóctonos (un 24% más de lo previsto inicialmente en el proyecto), la mayoría de especies productoras de frutos muy apreciados por el oso.
Replantaciones con la colaboración de Ciuden Vivero
Para mejorar el entorno de algunos pasos existentes en la autopista AP-66, que atraviesa el corredor, se han realizado plantaciones de cobertura y apantallamiento y el proyecto ha incluido también trabajos de restauración y mejora de hábitats de interés para el oso pardo en enclaves estratégicos. Todas las plantas del proyecto se han obtenido a partir de semillas recogidas en la zona de trabajo y cultivadas en el Vivero Forestal Central de la Junta de Castilla y León y en el centro “Ciuden Vivero” -ubicado en el Bierzo, en Igüeña-, del Organismo Autónomo Parques Nacionales.
Las plantaciones se han realizado en fincas adquiridas por la FOP, pero sobre todo en superficies desarboladas de montes de Utilidad Pública para lo que se han coordinado los trabajos con responsables de la Junta de Castilla y León y firmado acuerdos de custodia con Ayuntamientos y Juntas Vecinales. Todos los trabajos se han realizado previo consenso con administraciones, propietarios, ganaderos y otros actores locales.
Para las plantaciones se ha contratado a vecinos en paro y a empresas locales. Las acciones de divulgación y sensibilización dirigidas a la población local, han supuesto charlas y encuentros participativos con diferentes colectivos, un programa de educación ambiental para los centros escolares que ha llegado a cerca de 850 alumnos, plantaciones con voluntarios en las que han participado 230 adultos y niños, y salidas al campo interpretativas, “facilitando, de esta manera, la participación activa de los vecinos del territorio”, según los resposables del proyecto.
Los estudios de genética y los datos recogidos durante el proyecto reflejan que la presencia de osos en el corredor interpoblacional es cada vez más frecuente. “Las plantaciones contribuirán a hacer más permeable el paisaje y a mejorar la calidad del hábitat para los osos, y las actividades de sensibilización están favoreciendo la aceptación social y la imagen positiva del oso como elemento dinamizador de estas zonas rurales. Se están sentando las bases para que, en un futuro no muy lejano, éste extenso territorio albergue a un núcleo estable de osos”, afirman desde la FOP.